Dirigiendo a Justin Bieber

Son las 8:00 PM en el Madison Square Garden y el evento más grande del año – Justin Bieber en concierto – está a punto de comenzar. Las entradas para el show han estado agotadas por meses, y miles de chicas gritando esperan a que su rompecorazones entre al escenario. Pero primero, Justin y su equipo agachan sus cabezas para un momento de plegaria:

"Shemá Israel, Ado-nai Elo-heinu Ado-nai Ejad".

No importa que Justin sea cristiano. Bajo la tutela del manager judío de 29 años, Scooter Braun, las directrices de la carrera de Justin Bieber están firmemente basadas en la tradición judía.

En caso que hayas estado escondido en una cueva durante el último tiempo, Justin Bieber es la celebridad más buscada en Internet. A él se le atribuye el 3% de todo el tráfico en Twitter. Su video para la canción "Baby", con 450 millones de vistas, es el link más popular en YouTube.

Todo comenzó en el 2007, cuando Scooter Braun, un ejecutivo del mundo del entretenimiento que vivía en Atlanta, estaba investigando en Internet buscando la próxima “estrella adolescente”. Por accidente, se encontró con los videos de YouTube de un niño canadiense de 12 años, cantando improvisadamente en casa. Braun se conmovió: "Este chico tenia alma, una voz increíble, podía tocar múltiples instrumentos, y podía bailar. Lo tenía todo". Scooter hizo un enorme esfuerzo para contactar al chico.

La búsqueda lo llevó a Stratford, Ontario, un insulso pueblo en donde Justin estaba siendo criado por su madre soltera, tan sólo 18 años mayor que él. Al principio, la madre sospechó un poco del tipo agresivo al otro lado del teléfono, y lo alejó. Pero Braun persistió, y conversaciones posteriores revelaron que ambas partes, tanto Braun como ella, compartían un profundo compromiso con los valores familiares.

Justin y su madre volaron a Atlanta. Scooter les consiguió un contrato de grabación y administración. Y ahora, luego de una ascensión meteórica a la fama, Justin es simplemente el adolescente más popular del planeta y la estrella de una nueva importante película, Never Say Never.

Todo esto ha puesto a Justin en una frágil posición en donde podría terminar como muchas otras superestrellas adolescentes, cuyas vidas personales y carreras colapsaron en una trágica mezcla de drogas, exceso y narcisismo.

Ahí es donde entra en juego Scooter Braun: "Yo no voy a dejar que eso le ocurra a él", dice Scooter. "El talento nunca traiciona al artista. Son las elecciones personales las que traicionan al artista".

Scooter ha asumido también el rol de padre sustituto de Justin.

Scooter – a parte de manejar todos los asuntos comerciales de Justin y de dirigir su carrera artística, ha asumido también el rol de padre sustituto y es la influencia masculina primaria en la vida de Justin. "La única forma en que él pase a ser un adulto emocionalmente sano y que continúe teniendo una carrera exitosa es si él entiende sus responsabilidades", le dijo Scooter a AishLatino.com. "Él necesita las herramientas adecuadas para manejar la presión".

La primera tarea de Scooter ha sido construir un equipo caracterizado por un corazón genuino e integridad. "Tenemos una regla incuestionable para cualquier persona que trabaje con Justin: Si lo tratas como una superestrella, estás despedido inmediatamente. No lo mimamos. Lo hacemos responsable. Le exigimos que demuestre respeto a las personas. Si él comete un error, debe disculparse. Nuestro trabajo no es solamente guiar su carrera, sino también asegurarnos de que él crezca para ser un buen hombre".

Contratos de Caridad

Scooter Braun sabe un poco sobre los peligros de volverse malcriado. Él llevó una vida afortunada, creciendo en Darien, un suburbio de Connecticut, uno de los pueblos más afluentes de los Estados Unidos. La familia de Braun vivía en una casa con canchas de tenis, una piscina y una cancha de básquetbol techada. Scooter era un marcador estrella en el equipo de básquetbol Greenwich High, y fue elegido presidente de su clase durante tres años seguidos.

Entre toda la riqueza y el éxito, fueron los valores judíos los que sirvieron de contrapeso.

La idea de tomar responsabilidad fue siempre enfatizada. Su padre citaba frecuentemente la enseñanza talmúdica: "En un lugar en donde no hay hombres, debes levantarte y ser un hombre".

"Mis padres me educaron para seguir un alto estándar moral", dice Scooter, alias Shmuel ben Eliezer. "Ellos me enseñaron que cada ser humano es extraordinario. Depende de nosotros fijar metas nobles – y luego luchar por superarlas".

Con una casa casher, viajes a Israel, y otras actividades judías, la familia Braun era devota a firmes ideales judíos. "Educación, familia, caridad, Dios. Estos son los valores principales bajo los cuales me enseñaron a vivir, y esto forma la base de mi relación con Justin".

¿Cómo se manifiestan exactamente estos valores en la carrera de Justin?

"Cada contrato de negocios debe tener incluido un componente de caridad, sino, no hacemos el trato", dice Scooter. Por ejemplo, un dólar de cada boleto vendido va para "Pencils of Promise", una organización fundada por Adam, el hermano de Scooter, que construye escuelas en el Tercer Mundo. "Todo se trata de devolver una mano y ayudar a niños que necesitan una educación", le dijo Justin a MTV. "Soy capaz de ayudar a otros niños y eso es muy importante. Siendo yo un niño, significa mucho para mí".

Otro ejemplo: Scooter lanzó un concurso para apoyar al Hospital de Mujeres y Niños de Buffalo, Nueva York. La escuela que reuniera más centavos ganaría un concierto gratis de Justin Bieber. El concurso reunió $152,000 dólares – 15.2 millones de centavos, pesando 41 toneladas de cobre.

¿Cuál es el sentido de todo esto si no puedes marcar una diferencia en la vida de otros?

Justin ha tomado el apoyo a hospitales de niños como su causa personal. En cada ciudad, él se detiene en el hospital de niños y va de habitación en habitación para conocer a los niños y alegrarlos. La nueva película de Justin está siendo exhibida en hospitales infantiles por todo Estados Unidos, y algunas de las ganancias de su nuevo disco están siendo donadas. Justin explicó en un post de Twitter: "Estoy en la posición de ayudar, gracias a mis fans y a Dios… quiero ayudar a otros y siento que tengo una responsabilidad de hacerlo. ¿Cuál es el sentido de todo esto si no puedes marcar una diferencia en la vida de otros?".

Todo esto enorgullece a Scooter Braun. "Cuando yo crecí, mi padre me enseñó que los verdaderos modelos no son los atletas y los artistas. Sino que aquellos que hacen su trabajo a su mejor capacidad. Tenemos que servir como ejemplo para otros. Esa es la responsabilidad de cualquier ser humano, mucho más la responsabilidad de una celebridad. Y esa es la lección que estoy enseñándole a Justin".

Los padres de Scooter respaldaron sus dichos con acciones, inculcando en él el poder de dar. "Siempre había personas diferentes quedándose en nuestra casa – una familia de inmigrantes judíos Rusos, u otras personas necesitadas", dice Scooter. "En una ocasión dos hermanos de Mozambique necesitaban un lugar para quedarse por unas cuantas semanas, así que los aceptamos. En poco tiempo mis padres se convirtieron en sus tutores legales. Nos hicimos muy cercanos y yo fui recientemente "padrino" en una de sus bodas. Mirando hacia atrás, veo que hicimos mucho para ayudarlos, pero pienso que ellos hicieron mucho más por nosotros".

Orgullo Israelí

El orgullo judío de Scooter se extiende también para apoyar a Israel. Mientras que muchos artistas han cancelado conciertos en Israel debido a presiones por parte de grupos pro-palestinos, "Bieber Fever" llegará a Tel Aviv en Abril del 2011 para un concierto al aire libre que espera atraer a 60,000 personas. Toda la familia Braun se unirá al séquito, reuniéndose con la hermana de Scooter que asiste a la escuela de medicina en Tel Aviv. La familia planea quedarse después para celebrar Pesaj en la Tierra Santa.

La abuela de Scooter – quien pasó sus años de adolescencia en Auschwitz –también será parte del viaje. El (ahora fallecido) abuelo de Scooter sobrevivió Dachau y Mauthausen. Ambos se conocieron después de la guerra y se casaron, asentándose en Hungría. Luego en 1956 cuando se desató la revolución, la pareja orquestó un espectacular escape nocturno, viajando en un vagón tirado por caballos a través del campo, y cruzando la frontera de Austria justo por delante de los tanques soviéticos.

Cuando crecí, estaba enojado por no tener una familia más grande.

"Esa es una razón por la cual soy tan insistente con el tema de realizar un concierto en Israel", explica Scooter. "Cuando crecí, estaba enojado por no tener una familia más grande – tías, tíos, primos. Mi abuela fue la única sobreviviente de su familia. El Holocausto me hizo apreciar el precio que el pueblo judío ha pagado, y para mí, el Estado de Israel representa la idea de que los judíos nunca debemos temer por quienes somos".

Scooter está aplicando esta y otras lecciones judías fuertemente sobre su cliente y protegido, Justin Bieber.

¿Así que cual es la idea del Shemá?

Justin tiene 20,000 personas por noche diciéndole que él es lo más grandioso en la tierra", explica Scooter. "Por eso es tan crucial reconocer al Único que está sobre nosotros. Sin esa conciencia, no hay posibilidad de mantenerse centrado".

Con esa finalidad, la madre de Justin comenzó a formar "círculos de rezo" antes de cada espectáculo. Scooter se sintió incomodo con los temas cristianos, así que se agrupó con otro judío – Dan Kanter, el director musical del espectáculo – para decir su propio rezo, la primera línea del Shemá.

"Después del tercer espectáculo, mientras decíamos Shemá, Justin se incluyó", explica Scooter. "Yo estaba sorprendido. Pero él me dijo que nos había estado escuchando y que lo había memorizado. Así que ahora cada noche él lo dice con nosotros. A él le gustan las ideas que el Shemá representa".