8 formas de convertir la oscuridad en luz

3 min de lectura

Este Januca elige crear tus propios milagros.

En Januca celebramos los milagros. El milagro de cómo unos pocos e inexpertos macabeos derrotaron a un ejército inmenso y poderoso. El milagro de un pequeño frasco de aceite puro que duró ocho días en lugar de uno. El milagro de la supervivencia del pueblo judío durante miles de años a pesar de infinitos obstáculos y desafíos.

Esos milagros también representan una elección. Una elección que Matitiahu hizo cuando anunció: “¡Lucharemos!”. Una elección que hicieron los judíos cuando buscaron entre las ruinas del Templo y dijeron: “Crearemos luz”. Y una elección que hace cada judío: Seguiremos adelante.

He aquí hay ocho formas para convertir la oscuridad en luz.

1. Bondad. Salte de tu camino para ayudar a la gente. Sonríe a menudo. Halaga a los demás. Y recuerda que no podemos ser realmente amables con los demás si no sabemos ser amables con nosotros mismos.

2. Replantea tus objetivos. En lugar de pensar en lo que no te gusta sobre ti mismo o sobre tu vida, enfócate en lo que sí te gusta. Por ejemplo, en lugar de preocuparte por no tener suficiente dinero, plantéate mini objetivos positivos para ganar cada vez más.

3. Vive “como si…”. Muchas personas quieren lograr objetivos específicos para sentirse de determinada manera. Queremos un ascenso para sentirnos seguros. Queremos un título prestigioso para sentirnos poderosos. Queremos niños exitosos para sentirnos orgullosos. No tenemos que esperar a haber logrado una lista infinita de objetivos para estar contentos con nuestra vida. Actúa como si ya tuvieras todo lo que necesitas. Vivir “como si” estuviéramos experimentando la mejor versión posible de nuestras vidas, ilumina el camino para alcanzar nuestro potencial.

4. Piensa con creatividad. Demasiado a menudo las posibilidades de nuestra vida parecen muy angostas. Da un paso atrás y pregúntate: “¿Qué es lo mejor que podría ocurrir en esta situación?”. Piensa creativamente y considera una larga lista de soluciones e ideas. Cuanto más aprendamos a ver más allá de los límites a los que estamos acostumbrados, más espacio haremos para la luz de nuestro interior.

5. Mira a través de lentes espirituales. El mundo material está condicionado por escasez y limitaciones. Al ver la vida a través de lentes físicos, vemos pesadez, cansancio y caos. Pero el mundo espiritual, que simultáneamente nos rodea y late en nuestro interior, es expansivo y abundante. Es una fuente de energía constante, que emana de la Fuente de toda la energía. Todo tiene un objetivo, hay orden dentro del caos. Hay una luz que perfora el peso de la duda.

6. Abraza el cambio. Cuando estamos atascados en hábitos y rutinas, la vida puede parecer aburrida e imposible de cambiar. Pero el cambio puede ocurrir en cualquier momento, creando implicaciones sumamente profundas. Estudios recientes en el campo de la epigenética1 revelan que nuestro ADN, que creíamos inmutable, puede cambiar durante nuestras vidas. Si crecemos y trabajamos en nuestra personalidad, podemos suprimir la expresión de los genes dañinos y acentuar la expresión de los genes saludables. Hacer un cambio puede no sólo traer más luz a tu propia vida, sino que la mejora también podría permanecer para las generaciones venideras.

7. Conéctate con Dios. Parte de crear y mantener una relación con Dios es creer que Él te ama, que cree en ti y que quiere estar cerca de ti. La fe no sólo sirve para ayudarnos a atravesar momentos difíciles, sino que es la construcción diaria de un sistema de creencias en el que podemos conectarnos con Dios cuando estamos felices, cuando estamos tristes y cuando estamos en cualquier estado anímico intermedio. Trae la luz de esa conexión a tu vida diaria.

8. Ama el desafío. Cuanto mayor es el desafío, mayor es el potencial para la grandeza. Rav Dessler zt”l nos dice que este es el secreto de Janucá:

Debemos tener fe en que si Dios nos da una tarea de semejante dificultad, la clave para el éxito debe estar en la dificultad misma. El sentimiento de queno hay salida’ es fundamental para tener éxito en el servicio a Dios. Este es el secreto de la victoria hasmonea. Cualquier persona razonable hubiera pensado que era completamente imposible que un puñado de sacerdotes prevaleciera frente a un poderoso ejército. No había salida. Pero, sin tener otra alternativa, los hasmoneos entraron al ruedo. Y dado que lo hicieron, obtuvieron una ayuda celestial que trascendió los límites de la naturaleza. El milagro del aceite durando ocho días nos enseña que, si hacemos lo que debemos, en contra de las probabilidades, el socorro llegará de un mundo superior, el mundo simbolizado por ‘ocho’. Esto es cierto tanto para los desafíos físicos como para los espirituales” (Rav Dessler, Santuarios en el tiempo, p. 154).

Ocho días, ocho luces. En contra de todas las probabilidades, nosotros elegimos invitar a los milagros a nuestra vida y descubrir formas de iluminar la oscuridad.


Notas:

(1) DNA Methylation and Memory Formation, Nature Neuroscience, noviembre de 2010, Dr. Jeremy J Day y Dr. J David Sweatt

Haz clic aquí para comentar sobre este artículo
guest
0 Comments
Comentarios en línea
Ver todos los comentarios
EXPLORA
ESTUDIA
MÁS
Explora
Estudia
Más
Contacto
Lenguajes
Menu
Donar
Únete a nuestro newsletter
Redes sociales
.