Ideas
8 min de lectura
6 min de lectura
La organización de derechos humanos repite la propaganda de Hamás en un documento tendencioso y de mala calidad.
Los propios empleados de Amnistía Internacional han criticado su reciente informe sobre Israel, en donde acusan al estado judío de cometer "genocidio" en Gaza, una acusación que Amnistía no ha dirigido a ningún otro grupo. Ellos acusan a Amnistía Internacional de estar motivada en la creación de su informe condenatorio a Israel tanto por el antisemitismo interno como por el deseo de decir a sus suscriptores simplemente aquello que desean escuchar en vez de la verdad.
Cada vez son más los empleados que se fueron pronunciando en los últimos días, acusando a la otrora augusta organización de derechos humanos de elaborar un informe chapucero, inexacto y calumnioso. El último trabajo de Amnistía Internacional es una calumnia a Israel, difundiendo falsedades y reciclando los argumentos de Hamás. Sus mentiras están dañando a Israel y a quienes apoyan al país.
El sitio web de Amnistía Internacional tiene un nuevo eslogan en su página de inicio: "Israel comete genocidio contra los palestinos de Gaza". Esta es una referencia al informe de diciembre del 2024 de Amnistía titulado: "Te sientes como si fueras infrahumano: el genocidio de Israel contra los palestinos en Gaza". Este informe sensacionalista declara falsamente que "Israel cometió, entre el 7 de octubre y julio del 2024, actos prohibidos en virtud de la convención contra el Genocidio, esto es matar, causar graves lesiones corporales o mentales e infligir deliberadamente a los palestinos de Gaza condiciones de vida calculadas para provocar su destrucción física total o parcial". El informe añade que Israel lo hizo para "destruir a los palestinos en Gaza".
En los últimos años, Amnistía no ha acusado a ningún otro estado o grupo de cometer genocidio. Por tomar un ejemplo típico, en un informe reciente sobre los ataques de ISIS a la minoría yezidi en Siria, Amnistía Internacional se esfuerza por alejarse de la ONU, señalando que la ONU (pero no Amnistía) calificó las acciones de ISIS como "genocidio".
Los propios empleados de Amnistía Internacional han advertido que este informe es inexacto y que se vio motivado por una hostilidad reflexiva hacia Israel y no por una investigación rigurosa.
Amnistía documenta la represión y los conflictos en todo el mundo, a menudo proporcionando información vital sobre el destino de civiles y disidentes políticos en países represivos y asolados por la guerra. Sin embargo, en su voluminoso trabajo global, sólo han encontrado un caso (Israel) en el que supuestamente tiene lugar un genocidio.
Los propios empleados de Amnistía Internacional han advertido que este informe es inexacto y que se vio motivado por una hostilidad reflexiva hacia Israel y no por una investigación rigurosa, y que no describe las acciones de Israel en Gaza.
Los empleados de la oficina israelí de Amnistía Internacional no fueron consultados sobre el informe y desde su publicación han rechazado las conclusiones. La "sección israelí de Amnistía Internacional no acepta la acusación de que Israel está cometiendo genocidio", declaró Amnistía Israel en un comunicado oficial. Estos empleados son veteranos trabajadores de los derechos humanos y suelen ser duros críticos de la política israelí Sin embargo, comprendieron que deben alzar la voz y advertir al mundo sobre la deficiente investigación y el erróneo informe de Amnistía Internacional. En vez de investigar el accionar de Israel en su guerra contra Hamás en Gaza, Amnistía Internacional llegó a una "conclusión predeterminada", escribieron los trabajadores de Amnistía Israel.
La idea errónea de que de alguna manera Israel es singularmente malvada y peligrosa es aceptada como un hecho por gran parte de la comunidad internacional de derechos humanos. El desprecio por Israel impregna a Amnistía Internacional. En el 2010, el director de Amnistía Finlandia, Frank Johansson, describió a Israel usando un término intensamente insultante que por lo general se traduce como "escoria" o "inmundicia". Posteriormente se retractó por usar este término tan ofensivo. En el 2014, alguien que ocupa un alto cargo en Amnistía del Reino Unido comparó a Israel con ISIS. Al año siguiente, Amnistía del Reino Unido votó en contra de establecer una campaña en contra del antisemitismo en Gran Bretaña, a pesar de que previamente apoyó una campaña similar contra la islamofobia. En el 2022, Paul O'Brien, el director de Amnistía de los Estados Unidos, declaró públicamente que no cree que Israel deba existir como un estado judío. Agnes Callamard, la secretaria general de Amnistía Internacional, acusó públicamente al ex primer ministro de Israel Shimon Peres de asesinar al líder de la OLP, Yasser Arafat, una calumnia ofensiva que no tiene ninguna base en la realidad.
Amnistía Internacional dedica una cantidad "desproporcionada" de sus energías a desprestigiar a Israel, según ha revelado la organización NGO Monitor, mientras que "las dictaduras de gran parte del Medio Oriente, donde las violaciones de los derechos humanos son ocurrencias cotidianas y forman parte del mecanismo de control del régimen, sólo reciben una atención menor por parte de Amnistía".
Miembros judíos de Amnistía Internacional acusaron a la organización de fabricar un "análisis artificial" de las condiciones en Gaza, señalando que Amnistía estuvo "motivada por el deseo de apoyar una narrativa popular entre el público al que se dirige Amnistía Internacional", y que desde el ataque de Hamás a civiles israelíes el 7 de octubre del 2023, Amnistía Internacional ha fomentado "dentro (de la organización) una atmósfera que minimiza la gravedad de la masacre del 7 de octubre". Ellos sostienen que Amnistía ha mostrado sistemáticamente "una incapacidad, y a veces incluso una negativa, a referirse a las víctimas israelíes de una manera personal y humana".
Que supuestamente Israel está cometiendo genocidio era una conclusión inevitable.
Ellos revelaron que "desde el principio, en la correspondencia interna se había referencia al informe como el 'informe sobre el genocidio', incluso cuando la investigación estaba en sus fases iniciales. Que supuestamente Israel está cometiendo un genocidio era una conclusión inevitable".
"Esto es un claro indicio de parcialidad y también un factor que puede causar una tendencia prejuiciosa adicional", señalaron los miembros judíos de Amnistía. "Imaginen lo difícil que es para un investigador trabajar durante meses en un informe titulado 'informe sobre el genocidio' y luego tener que concluir que 'sólo' se trata de actividades que están lejos de ser un genocidio. "Esta clase de conclusiones predeterminadas no son típicas en otras investigaciones de Amnistía Internacional".
En su informe acusando a Israel de genocidio, Amnistía cita a oficiales de organizaciones terroristas.
En el informe, Amnistía Internacional describe haber entrevistado a "101 individuos", luego describe que 27 de estas personas eran "actores en sociedades humanitarias y civiles" y que "11 (eran representantes o empleados de municipalidades y autoridades locales". Lo que no se dijo es el punto obvio de que Hamás, el brutal grupo islamista designado como una organización terrorista por los Estados Unidos, Canadá, la Unión Europea, Australia y Gran Bretaña, controla Gaza con puño de hierro. Amnistía Internacional en efecto está admitiendo que confía en los miembros de Hamás como fuente de su información.
A lo largo del informe, Amnistía se refiere a información provista por lo que llaman "el ministerio de salud de Gaza"; en otras palabras: Hamás. El informe también es autorreferencial, citando repetidamente numerosos documentos de Amnistía Internacional que, nuevamente, citan a miembros del "Ministerio de salud controlado por Hamás.
El informe de Amnistía Internacional cita por lo menos a un funcionario de la Unión de Comités de Trabajo Agrícola, que es un brazo del grupo terrorista Frente Popular para la Liberación de Palestina. Su informe contiene decenas de alegaciones que se citan únicamente como "Entrevista por llamada de voz con trabajadores humanitarios", sin proporcionar ninguna información respecto a para qué organización trabajaban esas personas. Dado el tenor intensamente antiisraelí del informe de Amnistía, es muy probable que estos 'trabajadores humanitarios' trabajen para Hamás, o al menos que sean sus simpatizantes. El informe incluso cita "al municipio de la ciudad de Gaza, publicaciones en Facebook" como una fuente de su información. (La ciudad de Gaza, como el resto de Gaza, está gobernada por Hamás).
El calumnioso informe repite los argumentos de Hamás a lo largo de sus 296 páginas, tratando a los miembros de Hamás como fuentes legítimas de información.
El calumnioso informe repite los argumentos de Hamás a lo largo de sus 296 páginas, tratando a los miembros de Hamás como fuentes legítimas de información. Con esto, Amnistía ha mancillado su propia y prestigiosa reputación para blanquear la propaganda de Hamás.
Al luchar contra los combatientes de Hamás en Gaza, Israel enfrenta a un enemigo implacable que se oculta deliberadamente en núcleos de población civil. Cada muerte de un civil en Gaza es una tragedia, causada por la insistencia de Hamás en librar esta guerra y usar escudos humanos.
En los últimos días, líderes mundiales se han manifestado en contra de las escandalosas calumnias de Amnistía. "No estamos de acuerdo con las conclusiones de este informe", explicó el portavoz del Departamento de Estado de los Estados Unidos, Vedant Patel. "Ya lo hemos dicho anteriormente y seguimos encontrando que las acusaciones de genocidio carecen de fundamentos".
El vocero del Ministerio de Asuntos Exteriores alemán, Sebastian Fischer, denunció el informe: "La cuestión del genocidio presupone una clara intención de erradicar a un grupo étnico. Sigo sin reconocer tal intención clara y por lo tanto no puedo compartir las conclusiones del informe".
El Ministerio de Asuntos Exteriores de Israel dijo: "La deplorable y fanática organización Amnistía Internacional una vez más ha elaborado un informe inventado totalmente falso y basado en mentiras. La masacre genocida del 7 de octubre del 2023 fue llevada a cabo por la organización terrorista Hamás contra ciudadanos israelíes. Desde entonces, los ciudadanos israelíes han sido objeto de ataques diarios desde siete frentes diferentes. Israel se defiende de estos ataques actuando plenamente de acuerdo con el derecho internacional".
Al acercarnos a Janucá, llenemos de más luz el mundo y sigamos denunciando las declaraciones difamatorias de Amnistía Internacional, exigiendo más de Amnistía y de la prensa al hablar de Israel y de su guerra con Hamás.
Nuestro newsletter está repleto de ideas interesantes y relevantes sobre historia judía, recetas judías, filosofía, actualidad, festividades y más.