El poder de la palabra

01/03/2025

2 min de lectura

Tetzavé (Éxodo 27:20-30:10 )

La porción de la Torá de esta semana tiene una característica única: el nombre de Moshé no aparece ni una vez. Para hacer las cosas aún más desconcertantes, esta porción de la Torá suele leerse en la semana del 7 de Adar, que es el día del cumpleaños de Moshé y también su iortzait, el aniversario de su fallecimiento. En lugar de ocupar un lugar central, su nombre curiosamente está ausente.

Un famoso comentario de la Torá, el Baal HaTurim, conecta la ausencia del nombre de Moshé con su respuesta cuando Dios se enojó con los judíos por el pecado del Becerro de Oro. Moshé le dijo a Dios: "Bórrame de Tu libro si no perdonas al pueblo judío. Borra mi nombre de la Torá." (Ver Éxodo 32:32). Gracias a la abundante bondad y misericordia de Dios, los judíos fueron perdonados. Sin embargo, el Midrash dice que la maldición de un sabio termina cumpliéndose (Bereshit Rabá 74:4, 74:9). Por esta razón, el nombre de Moshé está ausente en la porción de la Torá de esta semana: aunque Dios perdonó al pueblo judío, dado que Moshé era una persona tan santa y justa, parte de su declaración tenía que hacerse realidad. Sus palabras tienen poder.

Lección:

Si bien Moshé fue el mayor profeta que jamás existirá, nuestras palabras también tienen un poder tremendo. Rezar no es sólo recitar palabras, sino que tiene el potencial de cambiar nuestra realidad. Dios nos dio el increíble regalo de la plegaria y la capacidad de dar bendiciones a los demás, que, cuando se dicen con sinceridad, pueden materializarse en algo real y tangible. Mientras que en este caso las palabras de Moshé causaron un vacío, nosotros podemos elegir palabras que inspiren, ayuden, sanen y construyan. Podemos optar por ser positivos con lo que decimos y cómo hablamos para ayudar a quienes nos rodean, a nosotros mismos y al mundo. Dios nos dio el increíble poder y privilegio del habla: nuestra responsabilidad es usarlo para el bien.

Ejercicio:

Da una bendición a alguien y piensa en que se haga realidad. Puedes darles a tus hijos una bendición especial expresando todo lo que deseas para ellos, o algo tan simple como desearle un buen día al cajero.

Haz clic aquí para comentar sobre este artículo
guest
0 Comments
Más reciente
Más antiguo Más votado
Comentarios en línea
Ver todos los comentarios
EXPLORA
ESTUDIA
MÁS
Explora
Estudia
Más
Contacto
Lenguajes
Menu
Donar
Únete a nuestro newsletter
Redes sociales
.