El shofar y el llanto de una madre

02/10/2024

2 min de lectura

la Tora se refiere a Rosh Hashaná como "Iom teruá", ¿por qué?

Rosh Hashana es uno de los días más celebrados en el mundo judío. Tradiciones como la manzana con miel, la cabeza de pescado y la granada son vistas en cada una de las mesas familiares que se reúnen para celebrar el comienzo del nuevo año. El sonido del Shofar resuena en cada una de las sinagogas —y en Israel también en las calles—. Sin embargo, la Tora denomina a esta festividad con un nombre diferente: "Iom teruá" (Levítico 23:24 / Números 29:1)

El Talmud (Rosh Hashana 33b) indaga sobre qué significa la palabra teruá y la conclusión a la que llega es que su significado es yebaba, tal como lo escribe Onkelus en su traducción al arameo. Ahora bien, la pregunta se hace inevitable: ¿Qué significa yebaba?

Los sabios llegaron a la conclusión de que yebaba se refiere específicamente a un tipo de llanto, y que es inmediatamente vinculado al sonido del shofar, la mitzvá de la festividad.

Para entender un poquito la relación entre el shofar y su sonido debemos entonces recurrir a uno de los textos del libro de Jueces (capítulos 4 y 5) y más precisamente al Cántico de Débora (5:28-30).

Allí se narra la historia de la madre de Sísara, un comandante del ejército cananeo que oprimió a los israelitas durante veinte años, y que en sus últimos momentos de vida vio cómo sus tropas fueron derrotadas por las tribus de Israel, que en ese momento eran comandadas por la profetisa Debora.

Pese a la caída de su ejército, Sísara logró escapar y “huyó a pie a la tienda de Yael, mujer de Héber el cineo; porque había paz entre Jabín rey de Hazor y la casa de Héber el cineo". (Jueces 4:17). Yael, en un principio le dio leche, lo hospedó y le prometió ocultarlo. Sin embargo, cuando Sísara se durmió, lo mató de un martillazo, actuando así a favor de los Israelitas.

Paralelamente, a lo que estaba sucediendo, el Cántico de Debora describe un detalle en su narración: Una mujer estaba sollozando (meyabeb) en la ventana. ¿Por qué mi hijo se demora tanto?  Y sollozaba y sollozaba. La madre de Sísara esperaba que su hijo retornara a su casa. Algo que nunca sucedió.

De este relato, los sabios vincularon la palabra meyabeb (sollozar) con yebaba. El Talmud pregunta luego cómo es el sonido de un sollozo. Y por cuanto que existen distintas manifestaciones de un llanto y no es posible llegar a una conclusión es que se toca el shofar con tres sonidos diferentes: teruá, tekía, shevarim

El llanto de una madre a la espera de su hijo ejemplifica el verdadero sonido de la angustia. La Tora decidió quedarse con esta imagen y esa desesperación como una muestra genuina de lo que el Shofar debería generarnos: un despertar de verdadero arrepentimiento.

Haz clic aquí para comentar sobre este artículo
guest
0 Comments
Más reciente
Más antiguo Más votado
Comentarios en línea
Ver todos los comentarios
EXPLORA
ESTUDIA
MÁS
Explora
Estudia
Más
Contacto
Lenguajes
Menu
Donar
Únete a nuestro newsletter
Redes sociales
.