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El significado más profundo de este icónico emblema judío.
El manto de plegarias judío, en hebreo talit, es uno de los objetos judíos más icónicos. Cuando pensamos en la plegaria judía, pensamos en personas rezando envueltas en su talit. Muchas obras de arte representan al judío devoto rezando y estudiando, envuelto en el talit. Muchos usan el talit como una jupá en su boda. El talit es tan simbólico del judaísmo que los fundadores del estado de Israel basaron en él el diseño de la bandera israelí.
El talit es una pieza de tela tejida con cuatro esquinas. En cada esquina hay borlas, llamadas tzitzit. De acuerdo con la Torá,(1) los flecos deben incluir hilos azules que, según el Talmud, proceden de una tintura producida de una criatura especifica llamada jilazón, una clase de caracol.(2) La identidad de esta criatura estuvo perdida durante siglos, razón por la cual se utilizaban sólo hilos blancos en la borla del tzitzit. En los últimos años, hubo muchos esfuerzos por identificar correctamente a ese animal, y algunas personas han vuelto a usar borlas blancas y azules.
Cada elemento del talit está cargado de un profundo simbolismo. Misteriosamente, la tela se utiliza como una metáfora de la creación. El versículo en Salmos(3) dice: "Tú (Dios) cubres de luz como un manto; extiendes los cielos como una alfombra". El Midrash(4) comenta que Dios, por así decirlo, se envolvió durante el acto de crear al mundo como uno se envuelve con un vestido y permitió que el brillo de Su esplendor llenara el mundo. ¿Qué significa esta metáfora?
Para responder, continuemos con otra enseñanza igualmente desconcertante. El Talmud(5) dice que cuando Dios creó el mundo, la existencia se expandió y creció como una tela que se teje en un telar, hasta que Dios detuvo ese crecimiento. El gran sabio talmúdico Reish Lakish enseñó: "Este es el significado del Nombre de Dios Sha-dai, que viene de la palabra hebrea dai, suficiente. Porque Dios le dijo al mundo 'suficiente'". Esta es otra referencia a la tela que se utiliza como una alusión a la creación del mundo. ¿Cuál es su significado más profundo y cuáles son los límites que Dios impuso a la creación y que el texto indica que son tan fundamentales que la palabra "suficiente" se convirtió en uno de los Nombres de Dios?
La ropa oculta pero también permite que se discierna la forma de la persona.
El significado de estas fuentes es el siguiente.(6) La ropa se usa para ocultar el cuerpo y brindar recato. Sin embargo, debido a que no es rígida, la ropa también permite que se discierna la forma de la persona.
Dios creó este mundo de una forma en la que Él está oculto y Su presencia no es obvia. Si la existencia de Dios fuera obvia, los seres humanos no tendrían más opción que seguir los dictámenes Divinos. Eso pondría fin al libre albedrío, condenando a la persona a una existencia robótica, sin sentido. Al enmascarar Su existencia, Dios crea el espacio para que los seres humanos tengan elección moral, para que construyan una vida ética y espiritual. La oportunidad de elegir el bien y no verse obligado a hacerlo, genera la inconmensurable satisfacción del autodescubrimiento y del desarrollo personal y permite que la persona se asemeje a Dios, que es completamente libre y no tiene impedimentos.
Por lo tanto, el Midrash usa la metáfora de la ropa para describir el "brillo del esplendor de Dios", aludiendo a lo llamativo de su presencia, porque aunque podemos ver la forma de la persona que viste una prenda si decidimos hacerlo, esto queda oculto ante una mirada superficial. Del mismo modo, podemos ignorar la realidad de Dios, pero esta realidad es visible si uno se esfuerza por verla.
La descripción que hace el Talmud de Dios deteniendo la expansión del tejido de la existencia ordenándole: "¡Suficiente!", implica que la presencia de Dios se volvía cada vez más evidente en la existencia, hasta que Dios limitó la comprensión de Su presencia ante quienes lo buscan. Esto significa la creación del libre albedrío, que otorga a la humanidad la capacidad de crear su propio yo espiritual. En esencia, Dios dejó el mundo incompleto, convirtiendo al ser humano en Su socio para completar el objetivo de la creación. Este acto de Dios limitando Su protagonismo es tan fundamental para nuestra existencia, que la Torá utiliza la palabra hebrea Sha-dai, suficiente, como un Nombre para describir nuestra relación con Dios.
Veamos ahora cómo se conecta esta idea con el talit. Cuando nos envolvemos en un talit, estamos envueltos por un pedazo de tela. La tela representa la realidad de nuestra existencia, con Dios de alguna manera oscurecido detrás de los contornos de la tela de la creación.
Esta tela tiene borlas de tzitzit en sus cuatro esquinas. Estas borlas se hacen insertando cuando hilos por un hoyo cerca de cada esquina. Estos hilos se atan con una serie de nudos cerca del hoyo, y el hilo que resta se deja suelto.(7) Los nudos representan una terminación parcial, los hilos sueltos representan el resto de una tarea. Esto describe al mundo en que vivimos, un mundo infundido de espiritualidad por Dios, mejorado por las generaciones previas y con mucho trabajo por hacer. Las borlas de las esquinas del tzitzit nos recuerdan nuestra responsabilidad de mejorar el mundo y hacer de él un lugar mejor. Son la parte no terminada de la creación que haremos todo lo posible por completar.
Las esquinas de la prenda son cuadradas, lo que representa un logro humano, porque como dice el Talmud(8) "La forma cuadrada no está en la naturaleza". El ángulo recto es casi siempre algo creado por un ser humano. Las fuerzas naturales suelen producir objetos con formas y aristas redondeadas. Si uno encuentra un cubo o un objeto con esquinas cuadradas (como el monolito de 2001: Odisea en el espacio), la gente asumiría que fue fabricado, no hecho al azar.
Envolvernos en un talit nos recuerda que debemos reconocer nuestras responsabilidades por hacer del mundo un lugar mejor, tal como lo indican las borlas, y aplicar el ingenio humano para modificar y manipular la existencia, como lo indican las esquinas cuadradas de la prenda.
La misma palabra tzitzit indica este tema. La palabra hebrea metzit significa mirar. Esto significa que Dios nos observa a través del tejido de la creación, y podemos sentir esta realidad si así los decidimos.(9)
También los colores blanco y azul de los hilos del tzitzit son significativos. Cada individuo tiene responsabilidades y oportunidades de influir positivamente sobre la sociedad. El color blanco, que indica pureza de intención, marca la pauta de esta idea.
Igualmente importante es abstenerse de hacer lo que es incorrecto e inmoral. El Talmud(10) dice que el tinte extraído de la criatura marina jilazón se parece al azul del mar. El azul del mar recuerda el azul del cielo, que atrae nuestra atención hacia el cielo, hacia Dios. Usando esto como una analogía para entrenarnos constantemente a ver que todo conduce en última instancia a Dios, tendremos el ánimo mental para tomar nota de las repercusiones de nuestros actos y, con suerte, alcanzaremos la autodisciplina necesaria para no incurrir en comportamientos destructivos.(11)
Rav Meir Leibush (1804-1879)(12) , conocido como el Malbim, ofrece otro enfoque de la representación alegórica de los colores azul y blanco. La luz blanca, que es la combinación de todas las longitudes de onda de color, representa la energía positiva integral necesaria para realizar buenas acciones. El color negro indicaría entonces un cese de energía, representando la represión total de los deseos impulsivos e instintivos. Sin embargo, como el judaísmo desaprueba el comportamiento ascético, que representaría el color negro, recurrimos al espectro de colores para nuestra metáfora de la disciplina y utilizamos el color azul. Esto nos dice que si bien el autocontrol de los deseos instintivos es necesario, la abstinencia y el alejamiento del placer no lo son.
Todos los simbolismos mencionados son ideas amplias y universales de la capacidad y la responsabilidad humana. Sin embargo, para que un individuo tenga una vida con impacto, debe encontrar la forma de expresar sus talentos y su personalidad singular en sus logros espirituales. Este componente adicional lo vemos en el objetivo que la Torá establece para quien viste un talit: "Estos serán sus tzitzit y cuando los vean recordarán los mandamientos de Dios y no explorarán tras de sus corazones y tras de sus ojos, tras de los cuales ustedes se pervierten" (Números 15:39).
El Sifri(13) ofrece la siguiente explicación para la admonición de no "explorarán tras de sus corazones y tras de sus ojos", lo que pareciera referirse a alguien que actúa con lujuria o impulsivamente.
El versículo de Eclesiastés(14) dice: "Alégrate, joven, en tu niñez, sigue el camino de tu corazón y la vista de tus ojos". En este versículo, la frase "seguir el corazón y los ojos" tiene claramente una connotación positiva. El mensaje es que una persona joven, que busca descubrir su identidad personal y su enfoque en la vida, necesita seguir la llamada de su corazón. No existe una definición estereotipada del judío perfecto. La mejor persona que puedes ser es la mejor versión de ti mismo. Para averiguar cuál es la misión que mejor se adapta a uno mismo, hay que ver qué vocación habla a tu corazón y tu perspectiva con el significado más claro y verdadero. El pueblo judío necesita eruditos, activistas y líderes. Y lo que es igual de importante, personas sencillas, éticas y honestas.
Sin embargo, al buscar un estilo de vida que permita la expresión individual, la Torá da ciertos parámetros. Al expresar el objetivo del talit la Torá dice: "recuerda los mandamientos de Dios" y entonces no "explorarás tras de tu corazón y tras de tus ojos" hasta el punto de la inmoralidad. Siguiendo las directrices morales de la Torá uno puede descubrir de forma segura su singularidad, que es el significado de "explorar tras de tu corazón y tras de tus ojos", sin miedo a cruzar una línea roja ética. Observar la Torá puede hacerse sin ningún compromiso con la propia individualidad. Este mensaje fundamental expresa al portador de un talit que la realización completa del deseo de mejorar el mundo sólo tendrá lugar tras un viaje de autodescubrimiento.
El mensaje del talit, que define nuestra responsabilidad de mejorar el mundo, los medios para lograrlo persiguiendo objetivos positivos y desarrollando la disciplina para evitar comportamientos negativos, y por último el mensaje de que un individuo puede expresar verdaderamente su yo interior a través de su judaísmo, sin duda es suficientemente impactante como para ser un emblema del judaísmo.
Notas:
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Qué belleza conocer más sobre nuestra cultura y sobre algo que es tan importante para nuestro pueblo como lo es el talit.
תודה על המידע