SUSCRÍBETE

El significado profundo de cubrir dos jalot en Shabat

Símbolos de nuestra gratitud por el amor de Dios

Gerda Weismann Klein cambió para siempre la manera en que pienso sobre la comida, el éxito y prácticamente todo lo demás. Una sobreviviente del Holocausto y activista por los derechos humanos, Klein visitó alguna vez mi escuela primaria para hablar sobre su extraordinaria vida. Pero lo que más me conmovió no fue el tiempo que pasó en los campos de concentración, sino cuando ganó un Emmy.

Al recibir el premio por un documental sobre su vida, Klein se sintió transportada nuevamente a la fila del campo de concentración donde repartían la sopa, donde un guardia nazi les servía un caldo aguado que representaba su frágil conexión con la vida. De vez en cuando, la cuchara del guardia bajaba un poco más en la olla y ella recibía un codiciado trozo de papa. Mientras sostenía su Emmy, Klein tenía conciencia de que ese era un momento especial en su vida. Pero eso palidecía en comparación con recibir ese pequeño trozo de papa.

Klein nos instó a tomar su historia en el debido contexto. Por un lado, nunca deberíamos tener que experimentar un mundo en el que la comida sea tan escasa y preciosa. Por otro lado, necesitamos una forma de recordar incluso nuestras bendiciones más cotidianas. Para Klein y para aquellos que escucharon su historia, un pequeño trozo de papa se convirtió en un símbolo de todos esos regalos que nunca debemos dar por sentados.

Puede ser difícil apreciar verdaderamente algo tan rutinario como comer, y vemos que fue una de las lecciones más importantes que el pueblo judío aprendió durante sus 40 años por el desierto. Cada mañana, los judíos salían de sus tiendas para recoger el maná, una sustancia parecida al pan que milagrosamente aparecía en el suelo, envuelta en una capa de rocío.

El maná era delicioso y nutritivo, y transmitía el constante cuidado de Dios hacia Su pueblo. Pero quizás la cualidad más importante del maná era su efimeridad. No se podía conservar por más de un día. Esto significaba que la única comida de los israelitas era el maná que recibían esa mañana. Ellos reconocían cada bocado como un regalo. Y también aprendieron a confiar plenamente en Dios, Quien cada día, sin falta, les brindaba Su bendición diaria de maná.

Los judíos de todo el mundo perpetúan la lección del maná durante la comida semanal de Shabat. Las dos hogazas de jalá recuerdan la doble porción de maná que caía cada viernes en honor al Shabat, y la jalá se cubre para representar la capa de rocío fresco que la rodeaba. Estos símbolos sirven como recordatorios tangibles del amor de Dios por nosotros y de nuestra gratitud hacia Él.

A lo largo del tiempo, las comunidades judías también añadieron sus propias costumbres para resaltar la lección del maná. Comidas judías deliciosas como los kreplaj (un plato de carne envuelto en masa) se convirtieron en una comida tradicional judía, evocando el maná cubierto de rocío. Es un maravilloso ejemplo de cómo incluso nuestra comida puede ser utilizada para reflejar nuestros valores más profundos.

Hoy en día, el término “comida reconfortante” se usa generalmente para describir alimentos que tienen un valor nostálgico o sentimental. Algunas personas asocian un plato determinado con su infancia o con su ciudad natal, y comerlo se convierte en una manera de transportarse a ese tiempo o lugar especial. De alguna manera, la comida de Shabat y los kreplaj son la máxima comida reconfortante que nos transporta en el tiempo al desierto, cuando nuestra comida era un regalo directo de Dios. Estos alimentos también nos recuerdan que las bendiciones del pasado siempre están presentes, ofreciendo con cada bocado una nueva oportunidad para la gratitud.

Haz clic aquí para comentar sobre este artículo

DESCUBRE MÁS

POPULAR EN AISHLATINO

guest
1 Comment
Más reciente
Más antiguo Más votado
Comentarios en línea
Ver todos los comentarios
Alexandra Kirschberg
Alexandra Kirschberg
26 días hace

Me encanta y hoy sobre todo que tengo el corazón roto de dolor por nuestros pequeños Kfir y Ariel como lo tenemos todos los judíos y alguna gente de buena fe. Me ha confortado un poquito ya que mi papá también estuvo en Auschwitz y sé de le que habla💔🧡🔯

EXPLORA
ESTUDIA
MÁS
Explora
Estudia
Más
Contacto
Lenguajes
Menu
Donar
Únete a nuestro newsletter
Redes sociales
.