Su padre se negó a aceptar el diagnóstico pesimista del médico. Su milagrosa supervivencia le infundió una firme gratitud por Dios, a pesar de la intensa propaganda comunista.
El avión de Nóaj Hertz fue derribado durante la Guerra de Iom Kipur en 1973. Los ocho meses de agonía que estuvo en prisión abrieron el camino para su retorno al judaísmo.
Durante el Holocausto, los monasterios fueron el refugio de Paula y ella se sumergió en el cristianismo. Pero ahora, a los 94 años, decidió que quiere morir como judía.
Estee Ackerman desea llegar a las Olimpiadas del 2020, siempre y cuando eso no entre en conflicto con Shabat. Una entrevista exclusiva de AishLatino.com