La diferencia crucial entre amor y respeto

22/07/2024

4 min de lectura

Y por qué ambos son esenciales para el matrimonio.

Si pudieras tener sólo uno, ¿qué escogerías? ¿Amor o respeto?

Aunque están entrelazados, amor y respeto son diferentes y cada uno tiene un propósito especifico en la relación.

Aunque ambos representan una necesidad humana básica, la mayoría de las mujeres responden que su necesidad primaria es el amor, mientras que la mayoría de los hombres consideran que su necesidad primaria es el respeto.

Las mujeres anhelan amor y desean profundamente ser deseadas y valoradas. Los hombres a menudo desean respeto y detestan la humillación. Aunque el amor es crítico para que una relación florezca, el respeto oxigena la relación. Sin ambos componentes, la relación puede marchitarse.

Jana Cotlar, una experta en relaciones, explica la diferencia entre amor y respeto con la siguiente analogía.

Un esposo conduce a casa al volver del trabajo y sabe que su esposa tuvo un día difícil. Espontáneamente se desvía de la carretera para comprarle helado. Él la sorprende en la puerta con su sabor favorito: menta con chispas de chocolate. Ella abre la puerta y ambos están radiantes por su considerado gesto.

Este hombre acaba de expresar su amor.

Nuevo escenario. Otro matrimonio, otro hombre. El esposo número dos conduce a casa desde el trabajo y se aferra tensamente al volante mientras piensa en su difícil día en la oficina. Mientras conduce por la monótona carretera, decide desviarse para comprarse a sí mismo un helado. No está para nada cerca de la heladería, pero sueña con dejarse caer en el sillón y ver una maratón de series en Netflix mientras come helado intentando calmarse.

Cuando se acerca a la salida de la carretera, recibe una llamada desesperada de su esposa. “Amor, por favor vuelve a casa de inmediato. Los niños están descontrolados y el bebé vomitó. ¡Te necesito YA MISMO!”.

Con un gran suspiro, él piensa: Bueno… ese helado tendrá que esperar. En vez de salir de la carretera, conduce directo a casa para ayudar a su esposa.

Este esposo acaba de expresar su respeto.

¿Cuál es la diferencia?

El amor a menudo se expresa a través de lo que hacemos por el otro. El respeto a menudo se expresa por lo que dejo de hacer por otro.

Cotlar afirma, “El amor a menudo se expresa a través de lo que hago por el otro. El respeto a menudo se expresa a través de lo que dejo de hacer por el otro. El amor llena el espacio. Se estira para dar y conectar, llenando el espacio entre dos individuos con belleza, calidez y cercanía. El respeto crea espacio. Deja a un lado el ego, los deseos y la lógica para hacer espacio para el otro”.

El amor llena el vacío del otro y disminuye la distancia entre dos personas emocional y físicamente. El respeto hace lo opuesto, crea el espacio, pero no de una forma en que aleja al otro. El respeto crea espacio para que la pareja pueda entrar en él. El amor crea conexión, mientras que el respeto invita a la conexión. El respeto invita a la conexión y el amor la asegura. Pero no puedes tener amor sin tener antes respeto.

Llenar y crear espacio son ambos elementos necesarios para una relación exitosa. Llenar espacio parece una necesidad más obvia, pero menos obvia es la importancia de crear el espacio.

La experta en relaciones Esther Perel afirma que no puedes tener unión a menos que haya separación. Decir "sí" llena un espacio, mientras que decir "no" crea espacio. Un matrimonio exitoso requiere equilibrio entre llenar espacio para otros (amor) y al mismo tiempo guardar espacio para que el otro entre (respeto).

Hacer espacio para Dios

En el judaísmo, las relaciones, particularmente entre los esposos, son una metáfora de la relación de la persona con Dios.

A veces, el judaísmo parece ser un gran "no": no hagas esto, no hagas lo otro, no puedes tener esto o no puedes tener aquello. Es similar al esposo que quería un helado, pero no pudo tenerlo debido a la necesidad inmediata de su esposa.

Dentro del marco del judaísmo hay tanto mandamientos positivos como acciones de las que nos abstenemos. Expresamos nuestro amor a Dios cuando cumplimos mandamientos positivos, como visitar enfermos, rezar y dar caridad. Similarmente, hacemos espacio para Dios al abstenernos de ciertas conductas, como seguir las restricciones alimenticias de kashrut y no hablar lashón hará (difamar).

Abstenerse no es igual de glamoroso ni produce la misma adrenalina que dar o expresar amor. Pero como dice Jana Cotlar: “El respeto es mucho más que ‘no hacer’. Dentro del vacío de la inacción hay una conexión y un lazo que llegan incluso más profundo. Escucha con atención. En ese espacio sagrado escucharás la voz del inmaculado altruismo; un lugar en el cual realmente se trata del ‘otro’. No hay promesas de glamour y emoción; su motivación es pura y simple. Este espacio es sólo para ti”.

Y cuando llevas a Dios a tu relación matrimonial, cuando haces espacio para Él, la unión matrimonial se convierte en un lazo inquebrantable.

Tanto el amor como el respeto son cruciales para un matrimonio y representan ángulos diferentes de cómo cultivar una relación profunda. El amor requiere empatizar y acercarnos para llenar el vacío del otro. El respeto requiere renunciar a lo que queremos en el momento por lo que la otra persona necesita.

A continuación hay algunos ejemplos de respeto y amor que puedes demostrar a tu pareja regularmente.

Expresiones de amor:

  • Sorprende a tu pareja con un regalo o una nota, porque sí.
  • Expresa tu apreciación agradeciéndole a tu esposo por una acción específica que hizo recientemente por ti.
  • Prepara o pide su plato o bocadillo favorito.
  • Sorpréndelo en el trabajo con un pequeño bocadillo.
  • Regálale un masaje o crea un día de spa sorpresa en casa.
  • Ofrécele ayudarlo con un proyecto relacionado con el trabajo o alivia otra carga para que él pueda enfocarse en eso.
  • Planifica una cita, unas vacaciones en casa, un viaje para reconectarse.
  • Comunícate en su idioma de amor con palabras de afirmación, contacto físico, actos de servicio, regalos o tiempo de calidad.

Expresiones de respeto:

  • Di “no” a compromisos comunitarios para tener espacio en tu vida para decirle si a las necesidades y deseos de tu pareja.
  • Abstente de responder un mensaje de texto cuando tu pareja te está hablando.
  • Contente para no decir algo doloroso en una discusión.
  • No “dejes todo a la vista”. Respétate a ti mismo/a y a tu pareja cuidándote físicamente y manteniendo los momentos en el baño privados.
  • Deja de intentar hacer muchas cosas al mismo tiempo cuando tu pareja entabla conversación. En cambio, siéntense juntos y dale tu completa atención para escuchar sobre su día y sus pensamientos.
  • Respeta los límites de tu pareja dándole tiempo para calmarse cuando esté alterado/a. No intentes forzar la conversación si no está listo/a para discutir algo difícil.

Aprende y practica amor y respeto dentro de tu relación para lograr una conexión equilibrada y simbiótica con tu pareja.

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