La lucha moral y existencial de Israel

12/05/2024

5 min de lectura

No desesperes. El pueblo judío vive.

Si consideras la condición actual de los judíos en el mundo, fácilmente puedes caer en la desesperanza.

La guerra contra Hamás, nuestros preciados rehenes todavía en cautiverio y la implacable amenaza de Irán afectan en primer lugar y especialmente a nuestros hermanos y hermanas en Israel, pero también, en menor medida pero de forma significativa, a todos los que estamos desesperadamente preocupados por nuestra patria y nuestro pueblo.

La metástasis del cáncer antisemita se extiende rápidamente por los campus universitarios, el odio sistemático al judío incluso entre profesores y administradores de instituciones de enseñanza "superior", las distorsiones y mentiras de los medios de comunicación, la parcialidad y la discriminación de los judíos por parte de miembros del Congreso, todo esto fácilmente puede generar una sensación de desesperanza. Cuando los "amigos" y los "aliados" utilizan las palabras adecuadas y emiten declaraciones elocuentes, pero no ejecutan acciones significativas, uno no puede evitar preguntarse: ¿cómo acabará esto?

La energía post 7 de octubre de ser parte de un pueblo unido, tenaz, decidido a derrotar a nuestros enemigos, a restaurar la seguridad y a luchar por la paz para todas las personas decentes, parece disolverse y dar lugar a la cruel realidad que se siente como una interminable soledad y aislamiento.

Era de esperar que la ONU condenara injustamente a Israel, y sería molesto pero no sorprendente si la Corte Penal Internacional (CPI) emitiera una orden de arresto contra el primer ministro Netanyahu. Pero cuando los Estados Unidos retienen un envío de armas a Israel mientras las FDI soportan la carga y pagan el precio de vidas humanas luchando contra un salvaje enemigo compartido, eso deja a los judíos y a quienes aman a Israel preguntándose si tenemos alguien a quien recurrir o con quien podamos contar.

¿Realmente creen que son el pueblo elegido?

Mientras conmemorábamos el día del Recuerdo del Holocausto la semana pasada, las FDI entraron en Rafah para iniciar una operación limitada como parte de su batalla contra un enemigo que encarna literalmente la ideología de los nazis.

Al reflexionar sobre la confluencia de estos dos eventos, pensé sobre la condición judía en el mundo hace 80 años, lo que ocurre hoy, y cómo una cosa puede educarnos sobre la otra.

El Rebe de Klausenberg, Rav Iekutiel Iehudá Halberstam (1905-1994), fue llevado a Auschwitz, donde murieron su esposa y sus 11 hijos. Él sobrevivió la guerra y llegó a los Estados Unidos, donde se volvió a casar, tuvo más hijos y construyó un grandioso movimiento jasídico. Luego se fue a vivir a Israel, donde construyó una próspera comunidad en Netania y estableció el hospital Laniado. Realmente era un individuo extraordinario.

En el campo de concentración, los guardias de las SS empezaron a burlarse del Rebe de Klausenberg jalándole la barba y empujándolo. Los viles soldados le apuntaron con sus armas cuando el comandante empezó a hablar. "Díganos, rabino", se mofó el oficial, "¿usted de verdad cree que son el pueblo elegido?".

Los soldados que custodiaban a la multitud aullaron de risa. Pero el Rebe no. Con voz serena, respondió alto y claro: "Desde luego que lo somos". El oficial se enfureció. Levantó el fusil por encima de su cabeza y lo estrelló sobre la cabeza del Rebe. El Rebe cayó al suelo. Con la voz llena de rabia, el oficial le gritó: "¿Todavía cree que son el pueblo elegido?".

Una vez más, el Rebe asintió con la cabeza y dijo: "Sí, lo somos".

Enfurecido, el oficial le dio una patada en la barbilla y gritó: "Judío estúpido, yaces en el suelo, golpeado, humillado, en medio de un charco de sangre. ¿Qué te hace pensar que son el pueblo elegido?".

Con la boca chorreando sangre, el Rebe le respondió: "Mientras no seamos nosotros los que pateamos en el suelo y asesinamos a personas inocentes, seguiremos siendo el pueblo elegido".

Antes de entrar a Rafah, el ejército israelí pidió la evacuación de 100.000 refugiados de Rafah Oriental. Las FDI anunciaron su llegada, avisaron a los civiles para que se trasladaran y los ayudaron a hacerlo. Las FDI lanzaron panfletos, enviaron mensajes de texto e hicieron llamadas telefónicas. Una grabación de una de estas llamadas se hizo pública, y allí queda reflejado el contraste de nuestros pueblos:

FDI: Nosotros debemos hacer todo lo que está a nuestro alcance para evitar víctimas

Civil de Gaza: Nosotros queremos morir y también nuestros hijos deben morir.

FDI: No, que Dios no lo permita…

Civil de Gaza: Nosotros amamos la muerte de la misma forma en que ustedes aman la vida...

(Al final del artículo tradujimos la conversación completa entre el oficial de las FDI y el civil de Gaza).

Mientras los judíos amemos la vida, incluso cuando ellos celebran la muerte, los judíos somos el pueblo elegido. Mientras las FDI mantengan sus niveles de moral y ética mientras luchan una guerra contra la maldad y el salvajismo, los judíos seguiremos siendo el pueblo elegido.

Antes de entrar, los soldados se reunieron para hacer lo que la Torá les instruye hacer a los judíos antes de salir a la batalla: rezaron, pidiéndole a Dios la victoria y la paz. Mientras los judíos rezamos por paz, mientras el enemigo reza por la guerra, los judíos seguiremos siendo el pueblo elegido.

Los judíos no confíamos en los medios de comunicación, en los Estados Unidos, en la comunidad internacional ni en la ONU para saber o sentir que somos el pueblo elegido. Es algo que depende de estar a la altura del momento, de ser judíos orgullosos, practicantes, morales y éticos.

El Rebe de Klausenberg sufrió una pérdida devastadora, pero nunca perdió su fe en Dios, su determinación ni su misión. Él sufrió y estuvo de duelo, pero luego puso un pie delante del otro y no sólo sobrevivió, sino que prosperó. Lo hizo sin dudar ni un momento de que formaba parte del pueblo elegido por Dios.

También nosotros guardamos luto y hemos sufrido, pero como miembros de ese mismo pueblo, de ese mismo Padre, con esa misma misión, también prosperaremos independientemente de quién esté a nuestro lado, quién nos apoye y quién nos entienda.


TEXTO COMPLETO DE LA LLAMADA ENTRE EL OFICIAL DE LAS FDI Y UN PALESTINO EN GAZA.

Ramy (oficial de las FDI): El radio de la explosión será inmenso y pondrá sus vidas en riesgo. Tienen que evacuar el edificio con sus familias y alejarse medio kilómetro. ¿Está bien? ¿Cuántos son? ¿Cuántas personas viven en tu departamento?

Abu Younes (Civil de Gaza): Somos una familia grande

Ramy: Todos deben evacuar. ¿Cuántas personas hay allí?

Abu Younes: Cada familia tiene alrededor de 20 personas.

Ramy: ¿Cuántas familias hay ahí?

Abu Younes: Tres familias.

Ramy: Muy bien. Infórmales a todos que esperaremos hasta que todos evacúen. Pero no nos queda mucho tiempo. ¿De acuerdo Abu Younes?

Abu Younes: Estamos muy lejos del Bank (la ribera).

Ramy: Escúchame, ¡esto es peligroso! Todos tienen que evacuar el edificio y alejarse medio kilómetro. Todos, incluyendo los ancianos y los niños. El radio de la explosión será inmenso.

Abu Younes: Querido, no puedo evacuar a todos. Necesitaré un mínimo de dos horas antes de poder evacuarlos a todos.

Ramy: Hermano, procederemos con el ataque sin importar si parten o no.

Abu Younes: Ataquen entonces, hagan lo que les plazca. Hagan lo que quieran.

Ramy: Nosotros debemos hacer todo lo que está a nuestro alcance para evitar víctimas

Abu Younes: Nosotros queremos morir

Ramy: Ustedes son responsables por asegurar la seguridad de los niños.

Abu Younes: Y también nuestros hijos deben morir

Ramy: No, que Dios no lo permita. Lo que quieres es convertirte en un "martir", ¿verdad?

Abu Younes: Efectivamente, así podemos exponer ante el mundo su brutalidad. Que Alá los maldiga. Sus actos tendrán consecuencias. Procedan como lo deseen.

Ramy: Abu Younes...

Abu Younes: No trates de convencerme, no me voy a ir. Sigan adelante y ataquen el bank, nuestras casas o cualquier lugar que quieran. Hagan lo que quieran.

Ramy: Abu Younes, ¿quieres que los niños mueran?

Abu Younes: Si quieren salvar a los niños, no ataquen el bank. ¿Por qué van a atacar el bank, en primer lugar? Es sólo un manojo de murallas

Ramy: la decisión no depende de mí, Abu Younes. Estoy siendo honesto contigo, no depende de mí. Lo que depende de mí es advertirte. Queremos que tú y tus hijos vivan en paz.

Abu Younes: Nosotros no queremos la paz que viene de ustedes.

Ramy: Si se quedan en el edificio, eso será considerado como suicidio, que es jaram. Su Corán lo prohíbe.

Abu Younes: ¿El Corán? ¿Tú conoces el Corán?

Abu Younes: De todas formas el Corán los maldice a ustedes. Hagan lo que quieran querido. De nuestro lado todos quieren morir. Nosotros amamos la muerte de la forma que ustedes aman la vida. No queremos la bondad que viene de ustedes. Notifica a tus líderes de las FDI que Abu Younes se niega a evacuar el edificio. Hagan lo que les plazca.

Ramy: Bien, les voy a informar.

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Stella De Camilli
Stella De Camilli
8 meses hace

"Mientras no seamos nosotros los que pateamos en el suelo y asesinamos a personas inocentes, seguiremos siendo el pueblo elegido". 👏👏👏👏👏👏💝🙌

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