Cicchetti es un término veneciano que se usa para describir una amplia gama de bocadillos locales, desde croquetas de arroz fritas, alcachofas asadas de la isla cercana de Sant'erasmo, huevos cocidos servidos con anchoas a albóndigas de carne, hasta el legendario baccalà mantecato (mousse de pescado) y el infaltable sarde in saor (sardinas fritas marinadas en cebollas agridulces).
Entre los mejores de estos bocadillos están estas polpettes o albóndigas de pescado, las que también puedes seguir cocinando en una ligera salsa de tomate después de freírlas, si prefieres servirlas como parte de una cena sobre polenta. Las albóndigas de pescado, al igual que las de carne, son un clásico de la cocina italiana judía sustentable y eran preparadas originalmente con sobras de pescado hervido u horneado. Sin embargo, estas son tan buenas que si no tienes sobras podrías querer cocinar pescado para poder prepararlas.
RECETA:
Tiempo de preparación: 20 minutos
Tiempo de cocción: 20 minutos
Tiempo total: 40 minutos
Rinde 6 porciones
Ingredientes:
- Alrededor de 4 rebanadas de pan blanco sin corteza
- Agua de cocción del pescado, donde se lo hirvió con apio, zanahoria o caldo de verduras
- 1 kilo de sobras de pescado blanco cocido
- 2 latas de anchoas con sal o aceite, coladas y picadas (opcional)
- Sal y pimienta a gusto
- 1-2 cucharadas de perejil fresco picado
- 1 pizca grande de nuez moscada y canela, opcional; o tomillo
- 2 huevos medianos/grandes
- Harina para cubrir
- Aceite de oliva para freír
Instrucciones:
- Remojar el pan en el caldo o agua de cocción del pescado hasta que esté suave. Colar y estrujar.
- Moler el pescado con el pan y las anchoas, sazonar con sal y pimienta, agregar el perejil y las especias. Probar y ajustar la sal si es necesario.
- Agregar los huevos, combinar bien y dejarlo descansar en el refrigerador por unos cuantos minutos. Si la mezcla aún está suave, puedes agregar una cucharada de migajas de pan (pan rallado).
- Con las manos mojadas, formar bolitas pequeñas (de 3 centímetros de diámetro). Cubrirlas con harina y freír en abundante aceite, en una freidora o en una olla gruesa con paredes altas. Para freír en abundante aceite, calentar al menos 5 cm del aceite de oliva a temperatura alta (se puede probar poniendo un trozo pequeño de pan en el aceite: si se forman muchas burbujas pequeñas alrededor del pan, la temperatura es la correcta). Freír en lotes pequeños hasta que estén doradas por todos lados, volteándolas para que se cocinen uniformemente.
- Retirar con una espumadera y transferir a un plato forrado con varias capas de toalla de papel.
- Servir caliente.