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¿Por qué Dios heriría a alguien que realmente ama?
El camino de la vida es un viaje lleno de baches.
Algunas personas tienen más baches que otras. Pero todos los tienen.
La pregunta es, ¿por qué? ¿Por qué Dios hace la vida tan desafiante?
Dios nos ama a cada uno incondicionalmente. Su amor es el amor más genuino que existe porque no depende de nada. Su amor es más grande que nuestros errores e inseguridades. Su amor por nosotros es infinitamente profundo porque Él es infinitamente profundo. Nunca cesará, como Él nunca cesará.
¿Por qué Dios heriría a alguien que realmente ama?
¿Puedes pensar en un caso en el que, de hecho, herirías a alguien que amas?
¿Puedes pensar en un caso en el que, de hecho, herirías a alguien que amas? No existe una madre llena de amor en el mundo que no haya llevado a su hijo al dentista a pesar de que el torno dolerá. Incluso puede que tenga que sujetarlo durante el proceso. Padres que aman a su hijo lo someterán a una cirugía para salvarle la vida, aunque la recuperación será dolorosa.
Heriremos a alguien que amamos cuando el resultado valga el dolor. Conservar tus dientes vale media hora de dolorosa perforación. La supervivencia supera seis meses de recuperación postoperatoria. Hay momentos en que heriremos a una persona que amamos porque la amamos.
Cometemos el error común de pensar que el dolor es malo. El dolor puede ser indeseable o desagradable, pero no es malo. La prueba es que a veces nos causamos dolor a nosotros mismos. Vamos al gimnasio o nos ponemos una inyección. Escalamos montañas y damos a luz. Estas actividades son dolorosas. Sin embargo, las realizamos, con entusiasmo, porque el dolor vale la pena.
En realidad, no nos molesta el dolor. Lo que nos molesta es el dolor sin sentido. Pero si el dolor tiene un propósito, lo aceptamos.
Una analogía llamativa de esta idea la hizo el gran maestro jasídico, Rav Kalonymus Kalman Shapira, conocido como el Rebe de Piaseczna, el Rabino del Gueto de Varsovia. Rav Shapira sufrió las torturas del Holocausto y pasó tres años en el Gueto de Varsovia. Después de perder a sus seres queridos, fue asesinado por los nazis en un campo de trabajo. Con tremenda fe y fortaleza, él enseñó Torá en el gueto, inspirando a las masas a pesar del infierno que estaban viviendo. Allí incluso escribió un libro desgarrador sobre la fe, titulado Aish Kodesh, Fuego Sagrado. En una de sus obras anteriores, Jovat HaTalmidim (La Obligación del Estudiante, Capítulo 12) escribe: "Pongan a un agricultor a agitar su hoz sin un tallo o malezas para cortar, y no podrá mantenerlo ni media hora". Rav Shapira señala que los seres humanos aceptan el dolor mientras haya un propósito subyacente. Si el dolor tiene sentido, lo soportaremos.
Rav Kalonymus Kalman Shapira, el Rebe de Piaseczna
Sorprendentemente, hay momentos en que incluso disfrutamos del dolor mismo. Pagamos cuotas premium de membresía en el gimnasio y hacemos ejercicio. ¡Siente cómo quema! Corremos maratones y nos encanta, a pesar de los músculos adoloridos.
Las personas confunden la comodidad con el placer, eligiendo huir del desafío y el dolor. El placer genuino necesariamente viene a través del dolor y el esfuerzo. Como señala tan sucintamente el Rebe de Piaseczna en Jovat HaTalmidim (Capítulo 9): "Lo único que se puede lograr sin esfuerzo es pudrirse en la tumba. Nada más". Quien esté dispuesto a pagar el precio del esfuerzo para lograr algo, disfrutará del esfuerzo, aunque duela.
Y esa es la razón por la cual la vida es un camino lleno de baches. Tú quieres que aquellos a quienes amas alcancen un verdadero placer.
Nuestros desafíos personales han sido calibrados para darnos la oportunidad de fortalecernos, de sacar a relucir nuestro potencial interior.
Cada bache ha sido colocado por un Ser que te ama profundamente. Nuestros desafíos personales han sido calibrados para darnos la oportunidad de fortalecernos, de sacar a relucir nuestro potencial interior. Si abrazamos el desafío y crecemos, la grandeza que alcanzaremos valdrá el dolor que pasamos. Así como un entrenamiento construye músculos físicos, el esfuerzo a través de los desafíos de la vida construye músculos interiores. Los baches en el camino de nuestra vida son nuestras barras de ejercicios personales.
Uno de los placeres más profundamente satisfactorios de la vida es dominar nuestro propio desarrollo. El Rebe de Piaseczna (Derej Hamelej, Rosh Hashaná, Leil Alef, 5691) dice que una persona que se construye a sí misma, específicamente a través del desafío, experimentará un manantial de felicidad al convertirse en quien puede ser, a pesar del dolor que esté atravesando. Esto puede experimentarse incluso en el Gueto de Varsovia.
El Rebe de Piaseczna (Jovat HaTalmidim, capítulo 4) escribe: "La cantidad de trabajo necesaria para adquirir algo corresponde al valor de lo que se está obteniendo. Cosas tontas y sin valor se pueden adquirir sin mucho esfuerzo, mientras que los objetos preciosos requieren trabajo para ser obtenidos." Tú eres precioso y quien puedes llegar a ser también lo es. Aunque pueda requerir mucho esfuerzo, el dominio propio lo vale. Tu grandeza interior vale la pena luchar por ella.
Entonces, ¿por qué un Dios amoroso me causaría dolor?
Porque me ama.
Este artículo está basado en "A Fire in the Darkness" de Rav Meir B. Kahane: una guía magistral para el crecimiento personal basada en la monumental obra Aish Kodesh escrita por el Rebe de Piaseczna. El Rebe escribió Aish Kodesh durante el Holocausto, en el Gueto de Varsovia, y allí aborda los profundos temas del dolor y el sufrimiento específicamente a la luz de un Dios bondadoso. El Rebe ofrece una guía perspicaz y práctica para crecer incluso en los tiempos más dolorosos, demostrando poderosamente que no existe nada por lo que una persona pase de lo que no pueda crecer, incluso un Holocausto. En "A Fire in the Darkness", Rav Kahane amplía la sabiduría del Rebe, proporcionando la orientación que desesperadamente buscamos hoy en día.
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