Judaísmo
2 min de lectura
11 min de lectura
Cómo el movimiento del siglo XVIII transformó el mundo judío y en definitiva resultó esencial para la supervivencia judía.
El judaísmo jasídico es una comunidad judía que se remonta a mediados del siglo XVIII. Comenzó en Medzhybuzh, en lo que hoy es Ucrania occidental, y con su énfasis en la plegaria, la meditación, la cercanía a Dios y las enseñanzas cabalísticas, dio lugar a un despertar espiritual que influyó sobre todo el mundo judío. A comienzos del siglo XIX, más de la mitad de los judíos de Europa Oriental se identificaban como judíos jasídicos.
Diversas comunidades jasídicas, nombradas de acuerdo a la ciudad o el pueblo donde se encontraba el Rebe (el líder espiritual jasídico), dominaron a la judería de Europa Oriental a lo largo de los siglos XIX y XX. El Holocausto puso fin a esta realidad de forma abrupta. Gran parte del mundo jasídico fue destruido. Desde entonces, lo han reconstruido y la mayoría de las comunidades jasídicas en la actualidad tienen sus centros en diferentes ciudades de Israel, en el área metropolitana de Nueva York, y en otros lugares como Amberes y Montreal.
A pesar de que los judíos jasídicos tienen muchas tradiciones y creencias significativas, la mayoría de los que no están conectados con ellos sólo saben que son comunidades muy unidas y cerradas, que tienen grandes familias y que se visten de forma distintiva.
En este artículo:
Un judío jasídico es un miembro de una comunidad judía jasídica, que gira en torno a un Rebe o el líder de una comunidad jasídica, y que lleva el nombre del pueblo o ciudad donde el Rebe ganó prominencia en un primer momento. Muchos de estos lugares originales (como Belz, Satmar, Vishnitz y otros) fueron destruidos en el Holocausto, aunque algunas de esas comunidades fueron reconstruidas después de la Segunda Guerra Mundial en Israel y Nueva York, y mantuvieron sus nombres originales.
Un jasid en Nueva York
Las comunidades jasídicas suelen ser muy unidas e insulares; mantienen costumbres especificas que afectan muchos aspectos de la vida, incluyendo el lenguaje de la plegaria, la vestimenta, las canciones, la observancia del Shabat y de las festividades y la educación, y viven juntas en pequeñas comunidades, por lo general a poca distancia de una sinagoga o centro comunitario central.
La historia del judaísmo jasídico comienza alrededor de 1740, tras un siglo de agitación y tragedia que sacudió al mundo judío. Algunos de los eventos más traumáticos de ese período fueron los excesos y estragos del levantamiento de Chmielnicki (1648-1657) que además de ser una rebelión cosaca contra el dominio polaco-lituano fue un ataque dirigido directamente contra la importante y próspera comunidad judía de la región. (Bogdan Chmielnicki, el líder de la rebelión, sigue siendo considerado hasta la actualidad como un héroe ucraniano). En efecto, los pogromos contra los judíos fueron un intento de genocidio que terminó con el asesinato de aproximadamente un tercio de los judíos de Europa. Los sobrevivientes quedaron empobrecidos y la erudición judía se volvió para muchos algo inalcanzable, fuera de una elite de puñado de eruditos.
Otro desafío de la época fue el falso movimiento mesiánico de Shabtai Tzvi (1648-1666), que tras el levantamiento de Chmielnicki dio lugar a un período de expectativas y esperanzas, que se desvanecieron cuando Shabtai Tzvi, el líder del movimiento y supuesto mesías, se convirtió al islam. A pesar de su apostasía, sus seguidores no perdieron la fe, lo que llevó a décadas de desconfianza, caza de brujas para exponer a los seguidores de Shabtai Tzvi y salvajes acusaciones y peleas entre líderes rabínicos.
El siglo XVIII fue también la época de la Ilustración o la Edad de la Razón, que en algunos casos concedió a los judíos libertades sin precedentes, pero también planteó nuevos retos respecto a la identidad y la fe.
En ese mundo surgió Rabí Israel ben Eliezer (1698-1760), más conocido como el Baal Shem Tov (Maestro del Buen Nombre), fundador del judaísmo jasídico. El Baal Shem Tov era miembro de una sociedad secreta de místicos llamada los Nistarim y en 1734 se convirtió en el líder del grupo. Previamente, él se había sumergido en la sabiduría judía, incluyendo siete años de meditación y reclusión en un pequeño pueblo de los Cárpatos. También estudió Cábala y diversas enseñanzas transmitidas por los líderes previos de los Nistarim. Él se estableció en Medzhybuzh alrededor de 1740, y allí fue cuando su fama comenzó a extenderse y atrajo a sus principales discípulos.
Las enseñanzas del Baal Shem Tov, que constituyen las bases del pensamiento jasídico, enfatizan un concepto llamado devekut, "apegarse a Dios", lo cual implica esforzarse por sentir la presencia de Dios en cada aspecto de la vida. Él también enseñó una "forma de rezar" que consiste en usar el servicio estandarizado de plegarias, en particular la "Amidá", como una herramienta meditativa.(1) Las enseñanzas jasídicas también están impregnadas de Cábala y, como resultado, muchos textos místicos se imprimieron por primera vez bajo los auspicios del movimiento. "La Cábala que hasta entonces había estado reservada sólo para los grandes eruditos, pasó a formar parte del folklore popular y hasta los individuos más sencillos se familiarizaron con su terminología".(2)
El Baal Shem Tov falleció en 1760, y para comienzos del siglo XIX más de la mitad de los judíos de Europa Oriental se identificaban como judíos jasídicos. Dado el tenor de la época, sus enseñanzas fueron un soplo de brisa fresca, lo que explica su atractivo masivo. Sus discípulos y las personas a quienes influyó dieron comienzo a un renacimiento espiritual que enfatizaba, además de la relación personal con Dios, la centralidad de la comunidad, y la importancia de un Rebe o líder espiritual, y fue esencial para preservar los valores y la practica judía frente a la modernidad y los horrores del siglo XX.
Los judíos jasídicos son judíos observantes de la Torá. Al igual que otros judíos observantes, ellos cumplen los mandamientos de la Torá de la forma en que son clarificados por el Talmud y codificados en el Código de la Ley Judía. Sin embargo, los judíos jasídicos enfatizan ciertas ideas importantes, como la cercanía a Dios, la alegría, la meditación, la plegaria, la comunidad y la Cábala, aunque esas no son innovaciones jasídicas. Lo que distingue al judaísmo jasídico es que enfatiza estas cosas de una manera diferente que otras comunidades observantes.
La liturgia jasídica, o el servicio de plegarias, es singular en cuanto que es una mezcla de las tradiciones ashkenazíes y sefaradíes. Fue desarrollado para incorporar las enseñanzas del gran cabalista del siglo XVI, Rabí Itzjak Luria (conocido como el Ari) en las plegarias ashkenazíes, aunque las costumbres varían entre los diferentes grupos jasídicos.
Otras costumbres particulares de los judíos jasídicos incluyen la inmersión casi todos los días en una mikve (para los hombres), dejarse la barba larga y rizos laterales (peot, ver más adelante), cantar melodías meditativas sin palabras (llamadas nigunim), comer las comidas de Shabat con el Rebe (esta comida se llama tisch, que en ídish significa mesa), costumbres especiales en las bodas y otros acontecimientos significativos.
La vestimenta jasídica es variada y a menudo difiere según la comunidad. Muchos hombres jasídicos usan durante la semana un rekel, que es un abrigo largo tipo levita, y en Shabat usan una versión más elegante y de mejor calidad llamada bekishe.
Las mujeres judías deben cubrirse el cabello después de casarse, indicando que se encuentran en un estadio más alto en la vida. Las mujeres jasídicas se cubren el cabello de diferentes maneras, ya sea con un sheitel (una peluca), un shpitzel (una especie de turbante), un tichel (pañuelo) o una combinación de peluca y sombrero. Las costumbres varían en cada comunidad.
El sombrero de piel que usan muchos judíos jasídicos se llama shtreimel (algunos hombres no jasídicos también lo usan). El shtreimel se usa en Shabat, en las festividades y en ocasiones especiales (como una boda), y por lo general sólo se lo comienza a usar después de casarse. El origen del shtreimel no está claro. Una teoría es que un gobernador de quien no se conoce el nombre decretó que los hombres judíos debían usar en sus cabezas una cola de animal cada Shabat. El shtreimel fue la solución que no sólo cumplió el decreto sino que también aceptó la burla y la convirtió en una insignia de honor. Otra teoría es que el shtreimel era el gorro de invierno de la nobleza rusa y polaca, y por lo tanto el sombrero perfecto para resaltar la importancia y la belleza del Shabat judío.
Algunos grupos judíos que tienen sus raíces en Polonia usan un spodik en vez del shtreimel, que es un sombrero de piel mucho más pequeño.
Otros sombreros que usan algunos judíos jasídicos son el Platchige Biber, que es un sombrero plano y duro de castor que muchos hombres jasídicos usan durante la semana (y en Shabat usan el shtreimel), así como el kasket, que es una especie de gorra que usan muchos niños jasídicos.
Muchos hombres jasídicos se dejan crecer rizos largos en las patillas, llamados peot, y esto viene del mandamiento bíblico de no "redondear la extremidad [del cabello] de sus cráneos". (En hebreo, estos "extremos" se dice peot. Ver Levítico 19:27). Específicamente, estas esquinas incluyen el cabello delante de las orejas y se extienden hasta debajo del pómulo, que es la zona a la altura de la nariz.
Un judío jasídico con shtreimel y peot (Imagen: Unsplash.com, Aharon Luria)
Ese cabello, a cada lado de la cabeza, no puede afeitarse y debe ser suficientemente largo como para poder jalarlo o doblarlo. Pero eso es sólo el mínimo. Cada persona puede dejarlo crecer tanto como desee, y algunos judíos jasídicos (a menudo dependiendo del grupo con el cual están asociados), eligen dejarlos crecer muy largos o rizarlos, o colocarlos detrás de la oreja.
Muchos hombres jasídicos también se dejan crecer la barba (al igual que muchos hombres que no son jasídicos). La razón es que la Torá dice (también en Levítico 19:27): "No destruirás las esquinas de tu barba", lo que se entiende que significa las "cinco esquinas de la barba". Estas esquinas son dos puntos en cada mejilla, además del mentón. Pero las opiniones varían, y la mayoría de los hombres no se afeitan.
A nivel místico, la barba representa el "Atributo de misericordia de Dios", que es un importante concepto espiritual. Dejar crecer la barba es paralelo al ideal esotérico y dicen que eso ayuda a conectarse con los beneficios que derivan de la compasión Divina. Idealmente, tener barba también te recuerda que debes ser más compasivo. Algunas personas también consideran que la barba es una señal de sabiduría. El ideal judío es crecer en sabiduría hasta que esta cubra el corazón, enseñándote a dirigirte con lo que sabes y hacer que tus pasiones estén supeditadas a tu sabiduría.
Los nigunim, o melodías sin palabras, son poderosas canciones melódicas a menudo asociadas con el movimiento jasídico. Los nigunim (en singular nigún), suelen ser simples y repetitivos, ayudan a quien lo canta a alcanzar un estado elevado y trascendente. Algunos nigunim son lentos y melancólicos, mientras que otros son estridentes y animados, y dependiendo de la situación, se los puede cantar durante mucho tiempo.
Algunos nigunim están asociados a grupos jasídicos específicos. Algunos Rebes también compusieron nigunim originales y algunos grupos jasídicos incluso tienen sus propios compositores. Estos nigunim se entonan en el tisch (en ídish, mesa) del Rebe o en un farbrengen (una reunión alegre), en Shabat, las festividades y otras reuniones importantes.
Un tisch de la dinastía jasídica de Boyan en Jerusalem, en la festividad de Sucot, 2009 (Wiki)
Un Mitzvá Tantz es una danza que tiene lugar al final de una boda jasídica cuando el Rebe y otros hombres de la comunidad "bailan" con la novia.
En las bodas jasídicas, hombres y mujeres bailan separados. Pero para el Mitzvá Tantz, la novia sostiene un gartel, una especie de cinturón que se usa para la plegaria, mientras su compañero sostiene la otra esquina y baila para ella. Algunas danzas duran como una hora, otras siguen hasta la mañana.
Un Mitzvá Tantz
El Mitzvá Tantz también tiene un profundo significado espiritual. En el pensamiento jasídico, los atributos masculinos y femeninos de Dios tienen que unificarse de alguna manera, y la boda judía simboliza ese concepto. En un nivel místico, el Mitzvá Tantz representa esa unificación espiritual.
Una dinastía jasídica es un grupo o "corte" jasídica alrededor de un Rebe o líder espiritual. Tras la muerte del Rebe, el liderazgo del grupo por lo general se transmite a su hijo, hijos o yerno. Aunque en algunos casos el grupo jasídico continúa sin que se nombre un sucesor para ocupar el lugar del previo Rebe. Un Rebe jasídico también se conoce como un Admor, que es una sigla que significa: "nuestro maestro, y rabino" (אדמו׳ר).
Jabad Lubavitch fue fundado en 1775 por Rav Shneur Zalman de Liadi, el primer Rebe del movimiento (conocido como el Alter Rebe). El segundo Rebe del movimiento, Rav Dov Ber Schneuri (conocido como el "Mitteler" o el Rebe intermedio), mudó su corte al pueblo de Lubavitch, que es donde se encontró su sede hasta la Primera Guerra Mundial. El nombre del movimiento, Jabad, es una sigla de las palabras hebreas para sabiduría, entendimiento y conocimiento (חב׳ד), que indica su base filosófica cabalística.
Un grupo de jasidim de Jabad
Jabad Lubavitch tiene su base en Crown Heights, Brooklyn, desde 1940 y no nombró un nuevo líder tras la muerte del séptimo Rebe de Lubavitch, Rav Menajem Mendel Schneerson.
Satmar fue fundada en 1905 por Rav Yoel Teitelbaum, en Szatmárnémeti, Hungría (actualmente este lugar se llama Satu Mare y forma parte de Rumania desde el final de la Primera Guerra Mundial). Tras la Segunda Guerra Mundial, el grupo se reconstruyó en los Estados Unidos, y hoy tienen su sede en Williamsburg, Brooklyn, y Kiriat Yoel, en Monroe, Nueva York. Hoy Satmar es uno de los más grandes grupos jasídicos, con más de 100.000 seguidores en todo el mundo.
La jasidut de Belz fue fundada en 1817 por Rav Shalom Rokeaj en lo que hoy es la ciudad ucraniana de Belz (Белз). Durante la Segunda Guerra Mundial, Rav Aharón Rokeaj, el cuarto Rebe de Belz, logró escapar de los nazis y reasentarse y reconstruir el movimiento en Israel.
El judaísmo jasídico se remonta a mediados del siglo XVIII. Su fundador, Rav Israel ben Eliezer, más conocido como el Baal Shem Tov, comenzó a enseñar en Medzhybuzh, en lo que hoy es el occidente de Ucrania, alrededor del año 1740. El pensamiento jasídico enfatiza la plegaria, la meditación, la cercanía a Dios y las enseñanzas cabalísticas. Y ante los horrores del siglo previo, introdujo un despertar espiritual que conquistó al mundo judío. A comienzos del siglo XIX, más de la mitad de los judíos de Europa Oriental se identificaban como judíos jasídicos. Los judíos jasídicos sufrieron terribles pérdidas en el Holocausto, y algunas de sus comunidades se reconstruyeron en Israel, Nueva York y otros lugares. Los judíos jasídicos son conocidos por sus comunidades cerradas e insulares, sus vestimentas distintivas, sus nigunim (melodías sin palabras), sus enseñanzas cabalísticas y el enfoque meditativo de la plegaria.
En hebreo, la palabra jasid (חסיד) significa "piadoso" y originalmente fue aplicada al Baal Shem Tov y a sus discípulos, pero con el tiempo pasó a referirse al movimiento que él fundó.
Se estima que en el mundo hay unos 500.000 judíos jasídicos.
Los judíos jasídicos hablan ídish, aunque los dialectos y la pronunciación varía en cada grupo.
Los judíos jasídicos son judíos observantes y si bien tienen enfoques diferentes respecto a la plegaria, la Cábala, la comunidad y otras costumbres, en general no se distinguen de otros grupos de judíos observantes de la Torá.
Notas:
Nuestro newsletter está repleto de ideas interesantes y relevantes sobre historia judía, recetas judías, filosofía, actualidad, festividades y más.