La Sucá
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¿Cuál es la definición de "Rav" y cómo llegas a convertirte en uno?
Rav es la palabra en hebreo para 'rabino' y no una abreviación como muchos piensan equivocadamente. Un Rav es un erudito judío, un experto en una o en muchas áreas de la sabiduría y el pensamiento judío. Puede servir de forma oficial como líder comunitario, maestro o juez; como un árbitro imparcial en disputas, aceptado por ambas partes; en una capacidad administrativa en diversas instituciones comunitarias judías; puede también brindar su opinión en áreas complejas y difíciles relativas a la intersección de la industria con la ley judía (por ejemplo en la industria de la kashrut), emitir decisiones vitales en casos médicos y otras miles de responsabilidades.
Pero hay muchos rabinos que a pesar de no tener puestos oficiales siguen siendo consultados para recibir su consejo y su guía, publican obras voluminosas, distribuyen regalos a los pobres, consultan con importantes líderes políticos y asumen un rol de liderazgo informal en los asuntos comunitarios.
En la era moderna, los rabinos también asumieron numerosas responsabilidades comunitarias y en la actualidad ofician en bodas y funerales, preparan a los jóvenes para su bar y bat mitzvá, dan sermones en los servicios de Shabat y en las Altas Fiestas, y cumplen muchas otras obligaciones del clero contemporáneo.
El anciano Rabino de Rembrandt
Un Rav es un importante líder y mentor, alguien a quien puedes acudir para recibir consejo y dirección. De acuerdo con el Talmud,(1) cada persona, incluso un gran líder, necesita tener un Rav con quien hablar, que pueda impartirle juicios imparciales y ayudarlo a trabajar sobre los muchos desafíos que encontramos en la vida.
En este artículo:
La palabra rav en hebreo significa literalmente 'grandioso' o 'reverenciado' y en un principio se usó de la manera en que algunas personas usan títulos como 'maestro' o 'señor'. El término sólo apareció en el siglo I de la era común, y no se lo utiliza en la Biblia hebrea. Los primeros líderes y maestros judíos no tenían títulos, y a menudo se les conocía simplemente por sus nombres (como Abraham, Moshé, Hilel y Shamai). Pero en años posteriores, especialmente durante la ocupación romana de Judea (que comenzó en el último siglo antes de la era común), el pueblo judío comenzó a utilizar "Rav" como un título para referirse a sus líderes y eruditos.
Algunas variaciones del término incluyen Rabán, que se refiere a algunos líderes del Sanedrín o la Alta Corte judía; Rebi, que tal como se lo usa en el Talmud se refiere específicamente a los rabinos ordenados en Israel, y Rav, el título talmúdico para los rabinos ordenados en (lo que el Talmud se refiere como) Babilonia, o el Irak moderno.(2)
El uso moderno del término incluye Rebe, que puede referirse al líder de una comunidad jasídica, aunque también se lo usa como una forma menos formal de referirse a un maestro; Reb, que puede usarse como un sustituto de señor (aunque a menudo precede el nombre y no el apellido de la persona); Rav, al referirse a una figura rabínica importante y distinguida, así como la forma genérica Rabí y la traducción en español: rabino.
El concepto del rabinato, un cuerpo rabínico colectivo con el poder de tomar decisiones y emitir decretos, comienza en el período del Segundo Templo (350 AEC-70 EC), con los hombres de la Gran Asamblea, y subsecuentes cortes rabínicas.(3) La idea de la corte misma es de origen bíblico, y se remonta a los días de Moshé,(4) aunque su poder, así como el rol y el uso del término "Rav", comenzó a evolucionar en el siglo I como una reacción al dominio romano.
En tiempos talmúdicos, bajo el imperio persa preislámico, en lo que hoy es Irak, las comunidades judías eran en cierta medida autónomas y los rabinos locales juzgaban los casos civiles, emitían decretos, fijaban estándares comunitarios e interactuaban con las autoridades no judías además de cumplir con sus roles tradicionales como maestros y líderes espirituales. Tras el período de los gueonim (los últimos 500 años del primer milenio), algunos escritores comenzaron a usar el término rabanim (רבנים), o rabinato, para referirse colectivamente a los líderes rabínicos de esa era. En ese entonces, la autoridad religiosa judía estaba en cierta manera centralizada, y el título era una forma de distinguir al liderazgo judío de la corriente dominante de una creciente minoría herética caraíta.(5)
Hasta la Ilustración, la emancipación y los albores de la era moderna, las comunidades judías gozaron de diversos grados de autogobierno, y las autoridades rabínicas locales arbitraban las disputas, tomaban decisiones legales y ayudaban con la supervisión general de la comunidad, además de dedicarse a sus preocupaciones más espirituales. Sin embargo, los gobiernos modernos en general fueron la única autoridad legal de su nación, lo que disminuyó el papel del rabinato, aunque no en las áreas cedidas al clero, como conversiones, circuncisiones, funerales, bodas y cosas similares.
En el Israel moderno, la oficina del Gran Rabino (el primer Gran Rabino de Israel fue Rav Abraham Itzjak Kook, que asumió el cargo en 1919), supervisa gran parte de los asuntos religiosos de la nación, incluyendo la supervisión de kashrut, la determinación y verificación del linaje judío de una persona, la supervisión de las conversiones, el mantenimiento de los tribunales rabínicos, la concesión de la ordenación rabínica y otras responsabilidades cívicas.
El concepto de ordenación rabínica deriva del libro de Números (27:18-23), cuando Moshé invistió a su sucesor, Iehoshúa (Josué) con la autoridad para liderar a la nación judía. "Dios dijo a Moshé: 'Toma a Iehoshúa hijo de Nun, varón en quien hay espíritu, y pon tu mano sobre él. Harás que se pare delante de Elazar el cohén y delante de toda la asamblea y encomiéndale ante la vista de ellos' … [Moshé] impuso sus manos sobre él [Iehoshúa] y le encomendó". El término para la ordenación rabínica, semijá, que literalmente significa 'poner' o 'apoyar', es tomado de este versículo: "pon tu mano sobre él", y simboliza la continuidad de la cadena de transmisión judía. De acuerdo con la tradición judía, la ordenación se hacía de un rabino ordenado a su estudiante, y ese proceso continuó hasta el fin del período talmúdico, unos 1700 años más tarde, cuando cayó en desuso probablemente debido a la opresión romana.
El Jafetz Jaim, por Igal Guinerman
Esta clase de ordenación ya no existe en la actualidad, y los rabinos no tienen una autoridad realmente investida en ellos como en el pasado. Sin embargo, las instituciones modernas a menudo ofrecen sus propios programas de ordenación para asegurar que sus graduados califiquen para puestos rabínicos. Las escuelas rabínicas (ieshivot) no tienen estándares universales, y algunas instituciones son más rigurosas que otras, pero en general la semijá asegura mínimamente que un rabino pueda tomar una decisión en temas básicos relativos a las complejidades de la comida kasher y otros temas. En Israel, el Gran Rabinato tiene un amplio programa de ordenación, que contiene diversos niveles de ordenación que califican a un erudito para diferentes clases de puestos rabínicos.(6)
De acuerdo con el Talmud,(7) cada persona necesita forjar una relación con un líder o mentor. Esa persona, un hombre sabio, tu Rav, te guiará por las complejidades de la vida.
Para lograrlo en un nivel práctico: busca alguien que hable tu idioma, que dé respuestas significativas a tus preguntas e invierte en esa relación. Formula más preguntas, pon a prueba su sabiduría, y lleguen a conocerse mutuamente. Además de poseer perspicacia y sabiduría, y de ser alguien que respetas y con quien puedes comunicarte, un buen mentor también debe inspirarte confianza. Tienes que elegir a alguien que te entienda, y que te empuje a desarrollar tu potencial. No elijas a alguien que te permita racionalizar o que no crea realmente en ti.
El término Rabí o Rav no aparece en la Biblia. El título fue usado por primera vez en el siglo I de la era común como una forma para referirse a los eruditos y líderes judíos.
A pesar de su título, los rabinos no visten un uniforme distintivo; no tienen restricciones como la abstinencia y no se espera de ellos que dirijan los servicios de plegarias ni que lean la Torá. Los rabinos visten ropa normal, se casan, tienen familia y participan en la vida de la sinagoga como el resto de la comunidad. Los rabinos son expertos en la ley judía. Prestan servicio a sus comunidades respondiendo preguntas, guiando a las personas y mostrando la importancia de vivir una vida judía.
Imagen principal obra de Igal Guinerman. Haz clic aquí para visitar su galería.
Notas:
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Despues de leer la definicion de Rav o Rabino.No creo que si el Rabino no necesariamente dirige los servicios o lee la Tora ¿Para que queremos tener un rabino?en una Sinagoga.