¿Cuál es el significado más profundo de la palabra 'sufrimiento' en hebreo?

Después del 7 de octubre, muchas personas ven el mundo a través de un lente diferente. ¿Por qué sucedió esto? ¿Cómo ocurrió? Mientras contemplas las atrocidades y los devastadores efectos colaterales a nivel comunitario, es posible que empieces a pensar en tus propios desafíos y luchas.

Cuando las palabras hebreas comparten las mismas letras o raíces, hay una conexión. La palabra hebrea para 'sufrimiento' es tzará. La palabra hebrea tzohar, que comparte las mismas letras, significa 'ventana' (ver Génesis 6:16). ¿Cuál es la conexión entre estas dos palabras aparentemente no relacionadas?

Una ventana te permite mirar hacia adentro y también hacia afuera. Además, puede llenar tu mundo de luz. Al reflexionar, el sufrimiento también puede servir para estos tres propósitos.

1. Mirar hacia adentro

La palabra hebrea lama, típicamente traducida como 'por qué', es una conjunción de dos palabras: le-ma — 'para qué'.

En lugar de preguntar "por qué a mí", los judíos preguntan "¿para qué propósito?". ¿Cuál es la lección que debo aprender aquí? ¿Qué puedo ganar de esta experiencia?

El sufrimiento sirve como una ventana para mirar hacia adentro y entenderte a ti mismo/a. Si fuiste intimidado/a en tu niñez, en lugar de herir a otros, puedes elegir convertirte en una persona más sensible que se asegura de no causar dolor a los demás.

En un nivel más profundo, el sufrimiento puede servir como un trampolín hacia el crecimiento interior.

Cuando una persona se rompe un hueso, el proceso de curación causa que el área alrededor de la fractura se espese temporalmente para proteger el hueso. El hueso se vuelve más fuerte donde se rompe. Del mismo modo, tu punto de quiebre doloroso puede convertirse en tu punto exacto de mayor fortaleza.

Ofri Reiner, quien sobrevivió a la masacre de Hamás en el festival Nova, corrió 18 kilómetros (cuatro horas) bajo un calor abrasador para encontrar seguridad. Ella logró manejar el trastorno de estrés postraumático al avanzar hacia algo que la psicología llama "crecimiento postraumático".

Ella explica que después de un evento traumático, hay una amplia gama de cómo tu cuerpo o mente reaccionarán ante el trauma. La mayoría de las personas experimentarán una recuperación natural con mínima terapia. Muchas personas experimentan trastorno de estrés postraumático. Pero hay otro apecto del proceso llamado crecimiento postraumático, con el que se identifican el 65% de las personas.

El crecimiento postraumático implica tomar tu trauma y transformarlo en algo positivo. El sufrimiento sirve como una forma de volverse más grande de lo que alguna vez fuiste.

Ofri pudo utilizar su dolor para crear hermosas obras de arte y desarrollar conferencias que ahora comparte en todo el mundo para ayudar a educar a las personas sobre la situación en Israel.

El sufrimiento es tu ventana hacia adentro. Te muestra dónde duele para que puedas curar la herida y volverte más fuerte en el proceso.

2. Mirar hacia afuera

Muchos de nosotros miramos por las ventanas proverbiales de nuestro hogar y vemos que el césped es más verde en otro lugar. Con el advenimiento de la tecnología, es casi imposible no ver la vida a través del lente de los celos y la comparación.

Intenta este cambio de paradigma:

En lugar de mirar hacia afuera y sentir celos, reconoce cuán desafiantes son las cosas para otras personas y reconoce tu bendición personal.

Tu lucha personal puede ser grande y sentirse grande, pero siempre hay alguien cuya lucha puede poner la tuya en perspectiva.

Cuando nació mi tercer hijo, tuve una hemorragia y el bebé terminó en la UCIN (Unidad de cuidados intensivos neonatales). Yo estaba físicamente débil por la pérdida de sangre y emocionalmente agotada por dividir mi tiempo entre mis hijos. Mi bebé estaba en la incubadora sin poder sentir mis caricias.

Después de una semana de ir y venir del hospital, me sentía agotada, como si no me quedara nada adentro. Recordaba sentir resentimiento porque tantas otras mamás podían llevarse felizmente a su bebé a casa y celebrar su nueva alegría.

Nunca experimenté tanto sufrimiento y preocupación como lo hice en ese momento. Pero en la sala trasera de la UCIN, donde los padres podían tener un pequeño respiro, escuché a otra pareja discutir su inminente alta del hospital. Su bebé había sido prematuro y habían pasado cinco meses agotadores en la UCIN. Compartían palabras de esperanza de que pronto terminaría. Sabiendo que el pronóstico de mi bebé era mucho más corto, recibí una poderosa lección de humildad. Si ellos podían superar cinco meses, yo también podía superar mi desafío.

Incluso cuando tu dolor se siente enorme y abrumador, si miras hacia afuera, siempre hay alguien que también está luchando a tu lado, aunque su vida externa parezca perfecta.

Como comparte Janice Kaplan en su libro Gratitude Diaries, "Dos brazos, dos piernas y estoy respirando. ¿Qué más podrías pedir?".

Mira hacia afuera y en lugar de sentir celos, nota las luchas de los demás; no solo el éxito. Cuando veas las otras luchas que existen, empezarás a reconocer tus propias bendiciones.

3. Una ventana deja entrar la luz

Irónicamente, el sufrimiento puede ser el mayor requisito previo para la paz interior y la alegría.

Ofri explica que después del 7 de octubre, irónicamente, ella se siente mucho más feliz. Aunque no está segura de creer completamente en Dios, se encuentra agradeciéndole por tener más tiempo en la tierra.

"La vida me parece mucho más hermosa ahora. Recibí un regalo, una nueva oportunidad de vida, y quiero aprovecharla. Muchas veces estoy asombrada por la belleza de los paisajes y la belleza de las personas que conozco".

Ofri explicó: "Estoy experimentando expansión en lugar de depresión".

Acercarte a otros también puede ayudarte a salir de tu abismo y servir como un puente de esperanza para alguien más. Superar tu dolor puede convertirse en una ventana de luz para traer esperanza a los demás.

Ofri ha conocido a muchas personas en su gira internacional y ha descubierto cuántas personas están sumergidas en mucho dolor. "Es impactante cuántas personas no pueden dormir por la noche debido a su dolor o sus preocupaciones. El mismo lente que robó mi inocencia es el mismo lente que ha creado hermosas oportunidades y expansión para mí".

En el momento, quizás no sientas que tu sufrimient0 puede traer algo bueno, pero es posible que algo bueno eventualmente surja de él. Busca el bien que el sufrimiento puede traer, aunque sea años después.

Existen innumerables organizaciones que han sido creadas por familias cuyos hijos o familiares estaban enfermos. Al igual que una ventana, el propósito que se obtiene del sufrimiento puede ofrecer una pequeña luz para los demás.

Por ejemplo, Galit Horowitz fundó LevLA, una organización que proporciona hospitalidad para aquellos que se someten a tratamientos médicos en Los Ángeles. Galit y su esposo, Shlomi Horowitz, han usado sus ahorros e incluso han pedido préstamos para proporcionar este espacio a quienes no pueden permitirse alojamientos cercanos a los hospitales de Los Ángeles.

Su visión nació después de que el primer esposo de Galit, Noam Capri, falleciera tras haber luchado contra una enfermedad durante varios años. Galit pasó años viajando de ida y vuelta al hospital varias veces al día.

Galit no quiere que nadie pase por lo que ella pasó y ha hecho su misión de vida albergar a las familias de los pacientes en los hospitales cercanos, sin costo alguno. Las familias que vuelan desde todo el mundo para recibir atención médica ahora tienen un lugar al que llamar hogar y se les proporcionan comidas caseras y cuidados. La familia Horowitz no recibe compensación alguna por la increíble bondad que brindan, el epítome del verdadero voluntariado.

El sufrimiento de Galit ha servido como una ventana para llevar luz a las vidas de cientos de personas que han tenido que caminar por el mismo camino que ella.

El sufrimiento en la vida es inevitable e importante. No solo indica cuando algo está mal, también sirve como una ventana de claridad hacia adentro y hacia afuera. Pero lo más importante es que puede traer una tremenda cantidad de luz al mundo.