4 estrategias que vale la pena considerar

Tu BeAv, el día 15 del mes de av, es el día del amor en el calendario judío. Para algunos, este día trae a mente los sueños y los deseos todavía no concretados. Por lo tanto, para todas aquellas que siguen buscando a esa persona especial con quienes les gustaría compartir la travesía de la vida, aquí hay cuatro estrategias que vale la pena considerar si deseas el próximo año en esta época poder marcar otra casilla en los formularios gubernamentales respecto a tu estatus matrimonial… (En este artículo nos enfocaremos más en las mujeres, pero tengan presente que la mayoría de lo que decimos puede aplicarse también a los hombres)

1. Deja de tratar de estar casada para esta época el próximo año.

Cuando sales a una cita y sientes presión por que este sea "el correcto", inconsciente (o conscientemente) tratas de forzar un resultado al proceso en vez de permitir que crezca de forma orgánica, placentera y enfrentando las cosas a medida que llegan.

Esto no significa no tener la intención de casarte al salir en citas. Pero hay una gran diferencia entre "Realmente me gustaría casarme en algún momento cercano" y "Tiene que ser este, porque si no es él tal vez nunca ocurra".

Convertir un deseo en una obligación que le adjudicas al próximo joven que se siente frente a ti no es un buen augurio para que lleguen a casarse en un futuro cercano.

Pierdes la oportunidad del momento porque estás ocupada tratando de dictaminar los resultados. Estar fijada en el futuro lleva a que pierdas el presente.

Este miedo puede sabotear el proceso de las citas. En cambio, trata de no tener control sobre lo que siente la otra persona. Haz lo único que puedes hacer: mantente auténtica a lo que eres, disfruta el momento, pásala bien, y…

2. Deja de cuestionarte si le gustas. Pregúntate si él te gusta a ti.

No te conviertas en un pretzel para que alguien te apruebe. En vez de dar respuestas verdaderas, tu miedo a ser rechazada te lleva a presentarte como algo que no eres en un intento de controlar lo que el joven piensa de ti y poder conquistarlo.

Todo ese manejo mental es agotador y le da a tu cerebro algo equivalente a un caso de artritis mental.

Por lo tanto, deja de analizar las interacciones desde esta perspectiva. Esa es su tarea y él se hace cargo. En vez de tratar de adelantarte y enredarte en una red de finalidad y presión respecto a si puedes o no pasar con esa persona el resto de tu vida, mantente en el presente y simplemente pregúntate si te gustaría volver a verlo.

¿La respuesta es que sí? Maravilloso. Salgan a otra cita.

Mantén esta actitud a lo largo de las citas. Esto te mantendrá con los pies en la tierra, auténtica, en el aquí y ahora… y podrás ver adónde van las cosas.

3. Estar completa emocionalmente

Para funcionar en nuestro estado óptimo necesitamos la cantidad adecuada de alimentos de buena calidad. Sin eso, no podemos funcionar, nos volvemos irritables, impacientes y críticos.

También tenemos necesidades emocionales que debemos saciar. Cuando ignoramos nuestras necesidades emocionales, nos desconcertamos y estamos fuera de sincronía con la persona que queremos ser, incapaces de emplear las cualidades que queremos resaltar.

A veces, la solución al vacío emocional simplemente es identificar las actividades que te llenan y te energizan e incorporarlas a tu vida. Puede ser leer un libro en el parque, acurrucarte en el sofá con una bebida caliente, volver a hacer yoga, pasar tiempo en la playa o encontrarte con una amiga que transmite energía positiva.

Cualquiera sea la actividad que te nutre, encuéntrala e incorpórala a tu rutina diaria, semanal y mensual para sentirte satisfecha emocionalmente y poder ser la mejor versión de ti misma.

Cuando disfrutas los diversos aspectos de tu vida, eso lleva a una sensación de plenitud, de satisfacción y confianza. Esto saca a la luz lo mejor de ti y transmite señales atractivas, interesantes, que despiertan en los demás el deseo de hacerte un lugar en sus vidas.

4. Estar en forma es importante

De la mano a llegar a ser la mejor versión de ti misma emocionalmente, también debes llegar a ser tu mejor versión físicamente. Cuando estás bien físicamente, te sientes mejor contigo misma e irradias energía.

Por lo tanto, estar en forma debe ser una prioridad en tu vida. Fíjate metas y cúmplelas. No hablamos de caminar veinte minutos cada día. Encuentra tiempo para hacer algo intenso que realmente marque una diferencia de forma constante.

Mantener un programa de ejercicios te hará sentir más fuerte y confiada en muchas áreas de tu vida, porque un cambio en cualquier aspecto es un cambio en todos los sentidos.

Cuando comienzas a tratarte mejor a ti misma, tus estándares en todas las áreas de la vida se elevan, y eso se reflejará en cómo te presentas ante los demás y en tus interacciones.

Si quieres estar casada en esta época el año que viene, deja de lado todo lo que no esté bajo tu control y haz todo lo que puedes hacer para vivir tu vida plena y saludablemente. Vive el momento. Mantente en contacto contigo misma. Escucha a tus deseos y deja de lado otras presiones.