Crecimiento personal
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Desde que cumplí 40, soy una persona diferente.
Desde mi cumpleaños numero 40 el año pasado, he cambiado. Estoy más tranquila, tengo más energía, sonrío más fácilmente y con mayor frecuencia. Me despierto cada día con la misma sensación que tengo después de haber ordenado un armario o de organizar mi cajón de cachivaches.
Creo que se debe a que durante los últimos años me dediqué a hacer una limpieza y orden emocional. Estoy mucho más en contacto con el lugar en donde estoy, lo que tengo y lo que aún necesito (o no necesito).
Después de haber despejado mucho barullo y desorden emocional, y en honor a mi cumpleaños número 41, aquí hay una lista de lo que he aprendido y por qué pienso que la vida es mejor a los 40.
Cada día es un regalo
Es mejor tener unos pocos buenos amigos que muchos conocidos
Simple es mejor
Las experiencias de mi vida superan mi educación formal
Puedo reírme de mis errores
Mis relaciones son más fuertes
No hay nada mejor que estar en pijama antes de la cena
Sé que el plan que Dios tiene para mi es mejor que cualquier cosa que yo misma pueda soñar
Encontré formas de hacer que el ejercicio sea divertido —carreras de obstáculos en el barro
El sueño es mi amigo
Gastar dinero para construir recuerdos es mejor que comprar más cosas
Es más fácil decir No…pero digo Si más a menudo
No tengo miedo de desafiarme a mí misma
Se lo que puedo controlar…y lo que no
Los amigos pueden transformarse en familia
Un hermoso atardecer puede alegrarme el día
Soy menos cohibida
Soy una persona más amable, más compasiva
Me encanta que mi vestuario está compuesto de unas pocas prendas y no me importa usarlas una y otra vez
Soy más capaz de decirles a las personas en mi vida que las amo y las aprecio
Puedo defenderme a mí misma
Comprar comida y comerla en casa es mejor que salir a una sofisticada cena gourmet
Aprendí cómo aceptar un cumplido y a aprender de las críticas
Sé cuando algo no me incumbe
Por lo general, puedo admitir cuando me equivoco
Dejar a la mañana un fregadero lleno de platos no es el fin del mundo
A veces salir a caminar es mejor que dormir una siesta
Aprendí a dejar pasar las cosas
Cuando te sientes bien contigo misma otros se sienten bien cuando están contigo
No tiene sentido tener celos de otra persona — tengo lo que necesito
Acepté que el cambio no es siempre algo malo
Puedo escoger mi estado de ánimo
Dejé de intentar ser como todos los demás
Tener la casa para mí sola es maravilloso
El tiempo se mueve más rápido, por lo que los buenos momentos son más dulces y los no tan buenos más fáciles
Aprecio las cosas pequeñas
Es más fácil pedir ayuda
Sé quién soy… y quién no soy
Soy más fuerte—física, emocional y espiritualmente
El futuro es fascinante
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