Cómo luchar contra el antisemitismo en esta época difícil

En el 2020, se estrenó en Netflix mi programa "Cambio de piel: antes y después". Allí, ayudaba a la gente a sacar lo mejor de sí misma efectuando procedimientos de cirugía plástica que les cambiaron la vida.

Muy pronto gané muchos seguidores por Internet. De repente, había un millón de personas que querían escuchar lo que yo tenía para decir.

En un primer momento, mantuve la conversación liviana. Hablé sobre mi trabajo y mostré fotos y videos de las cirugías que estaba efectuando y las increíbles transformaciones que experimentaban mis pacientes.

Pero cuando comenzó el conflicto del 2021 entre Israel y Hamás, cuando los misiles caían sobre Israel porque los terroristas trataban de matar a mi pueblo, ya no pude mantenerme callada. No podía sentarme y observar cómo los medios mentían sobre Israel y decían que nosotros éramos los agresores.

Entonces publiqué en Twitter: "SI PERMANECES CALLADO CUANDO LOS TERRORISTAS MATAN ISRAELÍES, ENTONCES MANTENTE CALLADO CUANDO ISRAEL SE DEFIENDE".

Mi mensaje se difundió como pólvora. La gente estaba orgullosa de que defendiera a Israel, especialmente porque tenía muchos seguidores. Yo estaba emocionada de ser esa voz y tratar de influir en otros y mostrarles la verdad sobre el pueblo judío y su patria.

Peor también recibí toneladas de odio y amenazas de muerte. Alguien envió un hocico de cerdo a mi oficina. Otra persona me mandó una foto de un revólver y me dijo que venían a mi casa. Perdí miles de seguidores apenas revelé que era pro-Israel.

Estaba nerviosa, pero eso no me impidió seguir hablando. Puse el número de la policía para llamar de forma rápida, contraté una empresa de seguridad y me aseguré de estar armada. Sabía que era natural tener miedo, pero al mismo tiempo, a lo largo de la historia, al pueblo judío nunca le sirvió tener miedo. Sólo logramos cosas cuando somos fuertes y valientes. Basta con observar al estado de Israel.

Al crecer en el Irán postrevolucionario, enfrenté el odio de frente. Allí, el gobierno iraní no permitía que los judíos ocuparan ciertos cargos ni que tuvieran los mismos derechos que otros ciudadanos. Por ejemplo, si un judío era el mejor alumno de su escuela, el gobierno no le permitía recibir ese honor.

Mis padres no veían que mi hermana y yo pudiéramos tener allí un futuro por ser judías. Las mujeres eran oprimidas y tratadas como ciudadanas de segunda clase. Nos escapamos de noche, en la parte posterior de una camioneta, y viajamos por el desierto mientras los policías iraníes nos disparaban.

Nada de lo que he enfrentado fue tan aterrador como eso. He sido testigo de lo que ocurre cuando el antisemitismo y el odio se apoderan de una sociedad, y por eso hago mi parte para combatirlo, tanto en internet como en la vida misma.

Afortunadamente, vivo en los Estados Unidos, donde tenemos libertad de expresión, aunque yo creo que lentamente nos la están quitando. Como judíos, necesitamos luchar por la libertad de expresión. Es importante permitir que la gente diga lo que piensa. Eso abre las líneas de comunicación y nos permite responder a la ignorancia y eso puede ayudar a que la gente sepa la verdad sobre nosotros.

Cuando la gente publica cosas ignorantes sobre los judíos o Israel, pero no son irrespetuosos, trato de hablar con ellos y educarlos. Mantengo una conversación o les envío recursos como artículos con hechos claros. Si vienen de un lugar de falta de respeto, los restrinjo o los bloqueo.

En un momento en que el antisemitismo está en alza, especialmente en línea, necesitamos sentirnos fuertes, no asustados.

Necesitamos apegarnos a nuestros valores básicos y entender que nos han dado libertad de expresión y libertad de pensamiento. No podemos desperdiciarlo ni evitar usarlo, porque de lo contrario pueden llegar a quitárnoslo.

Puedes salir lentamente de tu zona de confort y decir lo que sientes. Verás que todo estará bien.

Yo sabía que hablar era más importante que mis sentimientos. Sentí que era una obligación decir algo cuando los medios constantemente atacan a Israel. Sigo hablando hasta la actualidad.

También soy una gran proponente de la autodefensa, porque en todo el país ocurrieron ataques físicos a los judíos. Tener conciencia de la situación, llevar gas pimienta, aprender defensa personal como krav magá, y ser un propietario responsable de un arma puede ayudarte a sentirte más seguro físicamente y darte más fuerzas.

No excluyas a la gente, eso sólo los vuelve más extremistas. Si están abiertos a tener un diálogo, tú también debes estarlo.

El antisemitismo ha sido una plaga a lo largo de toda nuestra historia, pero no tenemos que sentarnos y aceptarlo. Podemos ser proactivos y defendernos, ya sea publicando por Twitter que somos judíos orgullosos o participando en manifestaciones a favor de Israel, o exigiendo que nuestros políticos rindan cuentas y asegurarnos que actúen para proteger al pueblo judío.

Asegúrate de conversar con las personas cuando valga la pena y estén dispuestas a escucharte. También tú debes estar abierto a escucharlos. Muchas veces, la gente simplemente no tiene educación y no conoce otra cosa. No excluyas a la gente, eso sólo los vuelve más extremistas. Si están abiertos a tener un diálogo, tú también debes estarlo.

Debemos unirnos con nuestros aliados. Si pasas todo tu tiempo en Twitter buscando las respuestas a hashtags de moda como "los judíos" o "Israel", probablemente pensarás que todo el mundo está en tu contra. Pero eso no es cierto. Tenemos muchos aliados que están dispuestos a defendernos, lo cual es muy tranquilizador y poderoso.

El pueblo judío es una nación eterna. El antisemitismo ha existido siempre, pero aquí seguimos estando. Puedes estar seguro de que nos aguarda un futuro brillante.

No temas. Habla. Y recuerda que estás haciendo una parte importante para perpetuar a nuestro pueblo y nuestro propósito.