La escandalosa historia del Códice de Alepo

28/06/2023

6 min de lectura

Cómo pudo regresar a Jerusalem el texto más antiguo, completo y exacto de la Biblia hebrea.

No estoy seguro qué hubiera pensado Sócrates sobre Internet y las redes sociales, pero en uno de los diálogos registrados por Platón, Sócrates criticó el arte de la escritura como algo que destruiría la memoria. "Este invento de ustedes creará el olvido en las mentes de los estudiantes, porque no tendrán que usar su memoria, sino que confiarán en los caracteres escritos externos y no lo recordarán por sí mismos…"(1)

En cierta medida, la tradición judía está de acuerdo y esta es una de las razones por las cuales durante más de 1.500 años la mayor parte del judaísmo fue transmitida en formato oral, lo que se conoce como la Torá Oral.(2) Eventualmente quedó claro que debido a las circunstancias del exilio, a menos que esa información fuera escrita, terminaría perdiéndose por completo. Alrededor del año 170EC, Iehuá HaNasí, un Rabino y líder del pueblo judío, decidió escribir la información oral en la forma de una obra de seis volúmenes conocida como la Mishná.(3)

Un Rollo de la Torá

Sin embargo, hay un texto que el pueblo judío ha preservado, copiado y transmitido durante más de 3.300 años en un formato que no ha cambiado desde la antigüedad: el Rollo de la Torá. El Rollo, escrito sobre pergamino en una escritura antigua, no contiene vocales ni signos de puntuación, tiene variaciones en la escritura de palabras plenas o defectivas, y tiene palabras que se pronuncian diferente a la forma en que están escritas. Toda esta información forma parte de la Torá Oral. Como dice el Talmud: "Rabí Itzjak dijo: La vocalización de los escribas, y la ornamentación de los escribas, y los versículos con palabras que se leen pero no están escritas, y aquellas que están escritas pero no se leen, son todas leyes transmitidas a Moshé de Sinaí".(4)

Preocupados porque esa información pudiera llegar a perderse, un grupo de eruditos, conocidos como los masoretas, decidieron escribir todo lo que había en la Ley Oral con respecto al texto del Rollo de la Torá. Ellos vocalizaron el texto (nekudot), registraron la entonación de las notas que proveen puntuación (taamei hamikrá o trop), enumeraron todas las variaciones textuales posibles, e indicaron todas las formas de escribir y pronunciar el texto sagrado. Debido a nuestra veneración hacia el Rollo de la Torá, ninguna parte de esta información fue registrada en el Rollo mismo. El Rollo es puro, sin adulterar, prístino, la antigua Torá y nada más.(5)

#Los masoretas estuvieron en el lugar y el momento adecuado para dedicarse a la tarea monumental de preservart el texto de la Biblia y sus tradiciones orales.

Los masoretas, principalmente la familia Ben Asher, vivieron en el siglo X en Tiberias, en las costas del Mar de la Galilea. En esa época, Tiberias era la capital de erudición, política, economía y cultura de Israel y la conquista musulmana había traído desde China la tecnología para producir papel. Los masoretas estuvieron en el lugar y el momento adecuado para dedicarse a la tarea monumental de preservar el texto de la Biblia y sus tradiciones orales. Ellos prestaron atención a cada letra, a los espacios entre los párrafos y los caracteres, a la disposición el texto, a las diferencias entre el texto escrito y el hablado, y contaron cuántas veces aparecían las palabras en toda la Biblia.

El Códice de Alepo

Después de años de trabajo, produjeron un Códice, un libro que contenía toda esta información tanto dentro del texto como notas marginarles conocidas como mesorá.(6)

Eventualmente el Códice, llamado Kéter o Corona, fue llevado a Jerusalem en algún momento del siglo XI, pero al parecer fue robado por los cruzados. La historia aquí se vuelve un poco turbia, pero aparentemente el Códice fue rescatado de los cruzados a cambio de una gran suma pagada por la comunidad judía.

En el siglo XII el Códice apareció en Fostat (una ciudad que eventualmente se convirtió en El Cairo), donde había una gran comunidad judía, bien establecida.(7) El sabios más famoso de Fostat fue Moshé Maimónides, quien vio el Códice y escribió: "El Códice sobre el cual me apoyo para muchos de estos temas fue un Códice conocido en Egipto, que incluye los 24 libros [de la Biblia]. Durante muchos años lo tuvieron en Jerusalem para poder revisar con él los Rollos de la Torá. Todo el mundo confía en él porque fue corregido por Ben Asher, quien dedicó muchos años a escribirlo precisamente y lo revisó muchas veces".(8)

Una página tomada del Códice, donde se pueden ver claramente las notas en los márgenes.

En el año 1375, el tataranieto de Maimónides, David, se fue a Alepo, en Siria, y se cree que se llevó con él el tesoro. El Códice se hizo conocido como la Corona de Alepo, Keter Aram Tzova. Los judíos sirios lo guardaban en la Gran Sinagoga de Alepo bajo intensa seguridad, sólo lo sacaban para la consulta o la lectura ocasional de los eruditos.

La Corona se mantuvo en la sinagoga hasta noviembre de 1947. Debido al incremento del nacionalismo árabe y la simpatía pronazi del régimen sirio, muchos creyeron que la Corona estaba en peligro. Itzjak Ben Tzvi, un historiador y líder sionista que posteriormente se convirtió en el segundo presidente del Estado de Israel, intentó llevar el Códice a Israel, pero no tuvo éxito.

En noviembre de 1947, el gobierno sirio instigó ataques contra la población judía y la Gran Sinagoga de Alepo fue incendiada. Corrieron muchos rumores respecto a lo ocurrido con el Códice. Algunos dijeron que había sido destruido, otros dijeron que se había salvado; algunos sostuvieron que lo salvó una persona, otros dijeron que el salvador fue otro. Dos eminentes eruditos del códice, Jaim Tawil y Bernard Schneider, enumeran por lo menos siete relatos diferentes sobre lo ocurrido con la Corona.(9)

La Gran Sinagoga de Alepo antes y después de los disturbios de 1947

Después del establecimiento del estado de Israel, la frontera con Siria fue cerrada y los esfuerzos para recuperar la Corona fueron mucho más complicados. Itzjak Ben Tzvi enlistó la ayuda de las fuerzas de seguridad israelíes, e involucró a diplomáticos, espías y Rabinos para volver a llevar a la Corona a Israel. También estuvo involucrada la unidad 504, una sección ultrasecreta de la inteligencia militar israelí especializada en infiltrar agentes a los países árabes (Mi autorización de seguridad no es suficientemente alta como para confirmar esto). Esta fue la unidad que  luego participó en la operación para obtener los Rollos del Mar Muerto.

El segundo presidente del estado de Israel, Itzjak Ben Tzvi, con un manuscrito hebreo.

También aquí hay muchas versiones respecto a lo ocurrido, pero eventualmente la Corona regresó a su lugar de nacimiento, Israel, aunque le faltan secciones y fue dañada por el fuego y por hongos. Ahora el foco está en preservar la Corona e investigar las partes que sobrevivieron.

Un manuscrito escrito en Tiberias, Israel en el siglo X, viajó a Jerusalem, fue "secuestrado" y rescatado, llevado a Egipto, de allí a Alepo, Siria y de allí nuevamente a Jerusalem, Israel. La Corona de Alepo es un símbolo de la continuidad judía, de la devoción judía a la Torá, y del retorno del pueblo judío a su antigua patria.


Notas:

  1. Platón, Phaedrus 14, 274c-275b
  2. Talmud de Babilonia, Brajot 7b, Midrash Tanjuma (Buber), Parashat Nóaj 3
  3. E. E. Urbach, “Introduction to the Mishnah and to One Hundred Years of Its Scholarship”, Scholarship in Jewish Studies, Vol. 2, (Jerusalem 5758) págs. 716-738
  4. Talmud de Babilonia, Nedarim 37b
  5. Código de la Ley Judía, Ioré Deá 274:7
  6. Crown of Aleppo: The Mystery of the Oldest Hebrew Bible Codex – Hayim Tawil and Bernard Schneider – Jewish Publication Society, Philadelphia, 2010 págs. 15-27
  7. Ibid. pp. 47-56
  8. Maimónides, Mishné Torá, Leyes del Rollo de la Torá 8:4
  9. Crown of Aleppo págs. 82-83

 

Haz clic aquí para comentar sobre este artículo
guest
0 Comments
Comentarios en línea
Ver todos los comentarios
EXPLORA
ESTUDIA
MÁS
Explora
Estudia
Más
Contacto
Lenguajes
Menu
Donar
Únete a nuestro newsletter
Redes sociales
.