La mejor forma de detener un suicidio

Kevin Hines tenía 19 años cuando se paró al borde del puente Golden Gate y saltó. Él es una de las pocas personas que sobrevivió la caída. En una entrevista de la CBS dijo que en el momento en que sus pies estuvieron en el aire lamentó haber saltado. Él declaró: "Si tan sólo una persona me hubiera manifestado una pizca de preocupación, no habría saltado".

El puente Golden Gate es una gran atracción y un ícono de San Francisco. Pero también es el principal lugar de suicidios en el mundo. Cada dos semanas, alguien salta para morir. Prácticamente todos los que viven en el área de la Bahía conocen a alguien que saltó del puente.

La prevención del suicidio y el beneficio de las cartas afectuosas que llegan a salvar vidas

Cartas de afecto

El Dr. Jerome Motto, un psicólogo que trabajó con pacientes con tendencias suicidas después de la Segunda Guerra Mundial, contó la historia de un paciente que saltó desde el puente Golden Gate y murió. "Después fui al departamento de esta persona con el asistente del médico forense. Era una persona de unos treinta y tantos años, vivía solo, en un departamento bastante vacío. Había dejado una nota sobre su escritorio. Allí decía: "Voy a caminar hacia el puente. Si una persona me sonríe en el camino, no saltaré". Motto agregó: "Eso era todo. Es innecesaria la cantidad de personas que se pierden".

La nota de suicidio decía: "Voy a caminar hacia el puente. Si una persona me sonríe en el camino, no saltaré".

La historia motivó a Motto a desarrollar un sistema que ha resultado efectivo para prevenir el suicidio. Se llama el modelo de "las cartas de afectuosas".

Durante su servicio en la Segunda Guerra Mundial, Motto recibió cartas de una mujer que había conocido poco antes de enrolarse. Él sostuvo que esas cartas le dieron el deseo de sobrevivir. Después de la guerra nunca volvieron a conectarse, pero él atribuye su vida a esa mujer.

Las cartas no eran románticas y simplemente compartían algunas frases sobre su rutina diaria o temas mundanos. Ella persistía en escribirle, sin importar si él le respondía. Motto sintió que eso probaba su genuina preocupacuión por él.

Usando esto como inspiración, su teoría es simple. Los terapeutas envían breves cartas expresando interés en el paciente que contempla la idea de suicidarse. La carta simplemente es una forma de conectarse con el paciente, sin aplicar en absoluto presión para que el paciente cambie sus planes.

Dr. Jerome Motto

"Las cartas de afecto" instauradas por Motto impactaron positivamente en el mundo. El programa tiene una correlación directa con la disminución de la cantidad de suicidios de los pacientes y en la actualidad es el único método probado para prevenir el suicidio.

Salvar una vida, de a una carta a la vez

No subestimes el poder de una palabra amable, una carta afectuosa o una sonrisa.

No es suficiente con evitar hablar negativamente. Usa tus palabras para transmitir a alguien pensamientos positivos.

Mi hermana mayor una vez estaba caminando por Nueva York con una amiga. Pasaron al lado de una mujer que tenía un broche con flores, algo que estaba de moda en esa época. Mi hermana se detuvo, le sonrió y le dijo: "¡Oye! Me gusta tu broche, es muy lindo".

Ellas siguieron caminando en la dirección contraria, pero la mujer corrió hacia mi hermana.

"Toma, quiero que te quedes con él", le dijo y comenzó sacarse el broche.

Mi hermana de inmediato le respondió: "¡No, no, no me has entendido! Yo no lo quiero, sólo quise darte un cumplido".

"Tienes que quedarte con él", le dijo la mujer. "Insisto. Quiero que recuerdes lo que hoy has hecho por mí. Nunca sabrás realmente lo que tu sonrisa hizo por mí, en especial hoy. Ahora mi día se ha transformado".

Mostrarle a la gente que la vemos y nos preocupamos tiene un poder transformador.

Mi hermana me regaló el broche después de contarme la historia, y todavía lo tengo. Es un recordatorio respecto a que el poder de una buena palabra es infinito. Con un rápido "hola" literalmente puedes dar vida a una persona. Mostrarle a la gente que la vemos y nos preocupamos tiene un poder transformador.

Cartas de gratitud

Una mujer llamada Jackie sufrió un horror inimaginable cuando sus tres hijas murieron en un accidente automovilístico. Su cuñada, quien conducía, estaba bajo la influencia de alcohol y drogas. La vida de Jackie se quebró y su depresión era severa.

En una entrevista, Jackie describió las manifestaciones de amor y apoyo que recibió de su familia, de sus amigos y de su comunidad. Colectivamente lograron sacarla de las profundidades de un dolor inimaginable y devolverla a la vida. Le enviaron regalos, le prepararon comidas, le escribieron tarjetas y se turnaron para pasar tiempo con ella para asegurarse de que estuviera bien psicológicamente. Nunca se apartaron de su lado.

En un momento, Jackie decidió poner fin a su vida y unirse a sus hijas en el cielo. Pero supo que antes debía escribir una carta de agradecimiento a todos los que la habían ayudado. "Puede que fuera suicida, pero no era mal educada", le dijo a Janice Kaplan, la autora de "El diario de la gratitud".

Ella agradeció a cada persona que la había ayudado en su momento de necesidad. Cuando terminó de escribir sus tarjetas, las palabras de valoración que había escrito lograron sacarla de la desesperación y ya no deseaba morir. Esta mujer literalmente salió de su depresión agradeciendo.

La luz al final del túnel

Kevin Hines dice que en medio de sus episodios suicidas no veía esperanza ni futuro. Él dice que hasta la actualidad "hay días en los que no veo la luz al final del túnel. Sólo sé que está ahí". Y al saber eso, es capaz de seguir adelante.

Que todos tengamos la fuerza de alentar a otros y ayudar a salvar vidas.