La espantosa mentira de Robert F. Kennedy Jr.

En una cena reciente en Manhattan, el candidato democrático a la presidencia y famoso teórico de la conspiración, Robert F. Kennedy Jr., promocionó la desacreditada teoría de que el Covid-19 fue creado para atacar a los caucásicos y a las personas negras, pero que los judíos ashkenazim y los chinos son menos propensos a sufrir sus estragos.

Posteriormente, Kennedy pidió disculpas y dijo que no lo habían entendido.

Es tentador descartar los comentarios de Kennedy. A fin de cuentas, él fue quien dio a entender que Anna Frank, la víctima del Holocausto, disfrutaba de más libertades que los norteamericanos que vivían con restricciones de salud pública, y hace poco publicó por Twitter su apoyo al músico Roger Waters después de que Waters se metiera en problemas por usar un uniforme nazi en el escenario en un concierto en Alemania y acusara a Israel de asesinar niños.

Sin embargo, las divagaciones de Kennedy sobre los judíos y el Covid merecen ser analizadas con mayor atención, porque reflejan antiguas calumnias antijudías.

Insultos medievales

Las acusaciones respecto a que los judíos propagan enfermedades mientras ellos se mantienen inmunes, tienen sus raíces en la Europa medieval.

Durante la Peste Negra, en el siglo XIV, los judíos a menudo fueron culpados de propagar la enfermedad. Los profesores Noel Johnson y Mark Koyama de la Universidad George Mason, y el profesor Remi Jedwab de la Universidad George Washington, estudiaron qué sucedió con los judíos durante la Peste Negra en Europa. De 363 comunidades judías europeas que había en ese momento, la mitad experimentó masacres por parte de los cristianos locales que acusaron a los judíos de propagar la plaga. A menudo pensaban que los judíos propagaban la Peste Negra envenenado los pozos de los cristianos. (No importa que en realidad la Peste Negra se propagara por las picaduras de pulgas infectadas y no a través del agua contaminada).

Esa mentalidad parece haber permanecido en algunos rincones de la imaginación popular. Por ejemplo, el líder de la Nación del islam, Louis Farrakhan, acusó en el 2010 a los judíos de introducir una maldición a la humanidad, "que se ha extendido por todo el mundo. Han envenenado el torrente sanguíneo del islam, del cristianismo…".

Hacer eco a la retórica nazi

La idea incorrecta de que los judíos propagaban enfermedades y muerte alimentó la ideología nazi y ayudó a allanar el camino para el odio generalizado hacia los judíos. "La propaganda nazi a menudo retrataba a las personas perseguidas por el régimen como alimañas, parásitos o enfermedades", señala el Museo del Holocausto de los Estados Unidos. Escuchar los delirios de Robert F. Kennedy Jr, respecto a que los judíos de alguna manera son inmunes al Covid-19, y que incluso pueden haber sido parte de un complot para "atacar" a blancos y negros, suena como una consecuencia directa de esta escandalosa calumnia nazi.

Culpar a los judíos por el Covid-19

Durante la pandemia de covid-19, los judíos fueron acusados con las calumnias más espantosas que declaraban que de alguna manera ellos eran los responsables por la difusión de la enfermedad.

Moshé Kantor, presidente del Congreso Judío de Europa, señaló que "Desde el comienzo de la pandemia de Covid-19, en el 2020, hubo un incremento significativo en las acusaciones de los judíos como individuos y de forma colectiva, como responsables de la difusión del virus y de beneficiarse directamente del mismo. El lenguaje y las imágenes usadas claramente se identifican como una revitalización de los "líbelos de sangre" medievales, cuando acusaban a los judíos de diseminar las enfermedades, envenenar los pozos de agua o controlar la economía".

Un estudio del 2020 de la Universidad de Oxford reveló que el 20% de los británicos creían que los judíos eran responsables de la creación y la difusión del Covid-19. La vil mentira de que los judíos dispersan las enfermedades parece echar raíces cada vez que encuentra un grupo de personas que son un campo fértil, dispuesto a repetirlo.

Enfrentar las mentiras

Es importante condenar la espantosa acusación de Robert F. Kennedy Jr., porque mientras más la gente escucha la vieja mentira de que "los judíos crean y contagian las enfermedades", más tracción gana esta vieja mentira.

En el polarizado mundo actual, es más importante que nunca señalar las mentiras cuando las escuchamos y defender la verdad. El mundo ya ha visto qué ocurre cuando los judíos u otros son acusados de malevolencia y de difundir enfermedades. No permitamos que las mentiras de Kennedy queden sin ser desafiadas.