La resiliencia del pueblo judío en las épocas más oscuras
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El objetivo de Rosh Hashaná es revelar la presencia de Dios en el mundo. ¿Cómo se hace eso?
Para algunos judíos, la liturgia de Rosh Hashaná puede ser desconcertante. El tema principal es "coronar a Dios como Rey", y las oraciones exploran la descripción de una utopía donde la presencia de Dios se manifiesta y todo está en armonía en el mundo.
Este es un tema bastante profundo. ¿Qué significa coronar a Dios como Rey? ¿Qué se supone que debo hacer YO al respecto?
El rabino Shlomo Wolbe, un gran ético del siglo XX que escribió numerosos libros sobre filosofía judía y desarrollo personal, dio una receta muy práctica que aclara un poco el tema. Él definió el objetivo de Rosh Hashaná como "comprometerse a revelar la presencia de Dios en el mundo a través de nuestras acciones".
¿Cómo se hace eso?
El rabino Wolbe definió cuatro puntos principales en los que enfocarse, basándose en el Talmud (Sotá, Capítulo 7), que enseña que hay cuatro grupos de personas que expulsan a Dios del mundo: los cínicos, los mentirosos, los aduladores y aquellos que hablan constantemente lashón hará, 'habla derogatoria'. Él infirió de aquí que los cuatro opuestos son formas de traer a Dios al mundo.
Definamos estos cuatro grupos de personas y sus opuestos, y cómo esto se aplica a Rosh Hashaná:
Un cínico obstaculiza activamente cualquier tipo de conexión con cosas que tienen significado. El cínico construye una barrera que impide que cualquier inspiración penetre en su corazón.
El opuesto al cínico es alguien que anhela significado, crecimiento y conexión. El Talmud enseña: "Uno que viene a purificarse, ellos lo ayudan" (Yoma, 38b), "ellos" son los mensajeros espirituales de Dios. El primer paso es avivar tu fuego interno y demostrar que deseas crecer. No importa si todavía estés inmerso en un comportamiento contraproducente, Dios garantiza que tu deseo sincero de mejorar abrirá la puerta al avance espiritual. Conéctate con esa parte de ti que realmente quiere cambiar, haz un compromiso sincero, incluso si es solo un pequeño paso. Dios reconocerá ese pequeño paso y te ayudará.
Una vez que has avivado tu deseo interno de crecimiento, el siguiente paso es aclarar tu destino. El objetivo es alcanzar la verdad.
Un mentiroso difunde falsedades y no tiene interés en la verdad. En hebreo, la palabra para 'mentira' es sheker. Esta palabra hebrea de tres letras, שקר, está compuesta por letras que se apoyan en un solo pie, por así decirlo. Las mentiras no pueden perdurar; son intrínsecamente inestables y están destinadas a caer, reveladas como lo que realmente son: ilusiones vacías. Contrasta esto con la palabra hebrea para 'verdad', emet, אמת, cuyas tres letras se mantienen firmes y fuertes sobre dos piernas. La verdad perdura.
La palabra emet tiene otra faceta única: está compuesta por la primera letra del alfabeto hebreo, por la letra del medio y también por la última. La verdad abarca todo. Requiere humildad reconocer que no lo sabes todo, que te faltan piezas del rompecabezas y que a lo largo de tu vida debes ser un buscador constante de la verdad, acumulando más y más piezas del rompecabezas.
La falsedad trae oscuridad al mundo. Comprometerse a llevar una vida basada en la verdad, por difícil que sea, es una directriz crucial para vivir.
Un adulador está impulsado por su constante necesidad de aceptación y atención. Está esclavizado a la validación y aprobación de las personas. Esta necesidad de aceptación es un agujero negro que absorbe la fuerza vital de uno, desconectándolo de su esencia espiritual y dejándolo sintiéndose vacío por dentro.
El opuesto es la libertad e independencia; es la valentía de hacer lo correcto, sin importar lo que puedan pensar las personas. Esa confianza proviene de una autoestima genuina, arraigada en el reconocimiento de tu valor intrínseco interno como un alma divina.
Esta independencia te permite liberarte de las expectativas falsas y limitaciones que tu sociedad te impone y, en su lugar, concentrarte en cumplir tu misión única en la vida.
Así que el primer paso es anhelar el crecimiento, el segundo es comprometerse con la verdad y el tercero es tener el coraje de vivir esa verdad.
Todos somos una mezcla de rasgos positivos y negativos. Alguien que constantemente se enfoca en lo negativo de los demás y denigra a las personas oculta la divinidad interna de una persona. En lugar de traer la luz de la verdad al mundo, esta persona insegura y de mente estrecha difunde la oscuridad.
El opuesto es buscar activamente lo bueno en los demás y hacer el bien a los demás, participar en actos de bondad. Ve la divinidad en los demás y, a través de dar, vuélvete más parecido a Dios.
Dios es infinito y no tiene necesidades. Encarna la cualidad de dar. La forma más concreta en que puedes revelar a Dios en el mundo es revelar chispas de divinidad en los demás y emular a Dios a través de actos de bondad.
Dios estableció que la humanidad sea su "socio" en la creación, y por ende, cada uno de nosotros tiene el poder, a través de nuestras acciones, de vivir una vida basada en la verdad y revelar algo de la luz de Dios en el mundo.
Shaná tová, que seas bendecido con un dulce año nuevo lleno de todo lo bueno.
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