Soluciones creativas para lograr que tus hijos pequeños cooperen

Aquí hay algunos trucos creativos corroborados para lograr la cooperación de niños en edad preescolar y de primaria en momentos difíciles (o desesperados).

1. Problema: Cuando se "planta" en la acera

Todos lo hemos vivido. Caminas con tu hijo pequeño, sin cochecito, y de repente él se sienta en el suelo y se niega a moverse. Añade un berrinche a la mezcla y ya tienes una idea de la situación...

Solución:

Si están con otro adulto, ofrécele al niño tomar los dos sus manos y hacerlo saltar después de cada cuenta de tres. "Uno, dos, tres... ¡zum!". Caminar de repente se convierte en un momento de placer y conexión.

Si estás solo, ¡no entres en pánico! Utiliza el "columpio helicóptero". Haz que el niño corra adelante y, cuando se detenga, corre hacia él, levántalo y hazlo girar como un helicóptero.

Fui escéptica cuando leí por primera vez sobre esta técnica en el libro de Miriam Adahan, "Criar hijos". Pero lo probé y funciona. Seis vueltas de helicóptero más tarde, ya estábamos en casa.

2. Problema: Ansiedad ante la separación

Solución:

El "Abrazo Eterno". Este abrazo prolongado hace que tu hijo sienta que no tienes prisa por irte. Cuando les das a los niños permiso de abrazarte "para siempre", suelen calmarse rápidamente. Si no te sueltan después de un período prolongado, simplemente esparce un poco de "polvo mágico" para deshacer el "pegamento eterno" y… ¡listo! Ambos estarán más felices y listos para avanzar.

3. Problema: Tu hijo "hace pucheros" y no puede superarlo

Solución:

Busca su cara feliz. Finge que la cara feliz está jugando a las escondidas y búscala por todas partes: debajo de las camas, en los cajones del escritorio y dentro de los armarios. Esto seguramente lo hará reír.

4. Problema: Tu hijo se niega a seguir las instrucciones o no coopera

Solución:

Usa un títere para lavar la cara de tu hijo, cepillarle los dientes o el cabello. Alternativamente, el títere puede "ordenarle" que limpie su habitación. Este títere al ser un tercero alivia la lucha de poder, y los juegos mejoran el humor.

Otra alternativa es cantar lo que le instruyes que haga.

Yo canto cuando quiero gritar (la mayor parte del tiempo). "Por favor, cepíllate los dientes ahora mismo", es un estribillo que repito cuando mis hijos más pequeños no quieren cooperar. Una canción graciosa suele funcionar en la mayoría de las situaciones (como llamarlos a cenar, despertarlos para llegar al autobús o ir a la cama). Incluso si no logra que se haga el trabajo, al menos tú y tu hijo se reirán.

5. Problema: Tu hijo se porta mal o no actúa de manera apropiada para su edad

Solución:

A veces, no puedes simplemente distraer la atención. Necesitas disciplina.

Una forma de abordar esto es simplemente decir: "Veo que no quieres..." (inserta cualquier privilegio discutido previamente).

Por ejemplo, "Veo que no quieres ir a la casa de tu amigo". O comprar ese nuevo monopatín…

¡Sólo prepárate para cumplir lo que digas!

6. Problema: Tus hijos no quieren ordenar o guardar algo que ellos hicieron

Solución:

Los niños trabajan duro cuando juegan creativamente, y desarmar la estructura o el rompecabezas que acaban de completar para guardarlo puede hacer que sus esfuerzos parezcan inútiles. Ofréceles sacar una foto de su creación para inculcar la permanencia y el reconocimiento que ellos anhelan.

7. Problema: Tu hijo tiene miedo de los monstruos o de la oscuridad

Solución:

Crea un "mata-monstruos" casero. Llena una botella de spray con agua (también puedes agregarle perfume o agua de rosas) y antes de acostarse procedan a rociar los monstruos, duendes u otras cosas aterradoras que viven en la oscuridad.

8. Problema: Tu hijo no quiere cambiar de lugar (subir las escaleras, ir a su habitación, al baño o a otro lugar según sea necesario)

Solución:

¡Imita diferentes animales para hacer que el "viaje" sea divertido! Dile: "¡Salta como una rana por las escaleras! ¿Quién es una mejor rana? ¡Mi rana va a atrapar a tu rana!" O dile: "Vamos a deslizarnos como serpientes hasta la bañera". A los niños les encanta tener opciones, así que también puedes pedirles que elijan su propio animal.

9. Problema: Los niños no quieren hacer las tareas domésticas

Solución:

Comienza con tareas domésticas pequeñas. Pide a cada niño que retire las cosas de la mesa, según su edad. Al principio, a mi hija de cuatro años no le gustaba sacar cuatro cosas, pero cuando lo hicimos juntas las primeras veces, ya no quiso dejar de hacerlo. Eventualmente, los niños completarán esta tarea sin necesidad de que los motives.

Estos trucos me han ayudado a superar algunos momentos difíciles con mis hijos a lo largo de los años. Podemos pensar: "Uf, requiere mucha energía llevar a cabo estas ideas". Pero requieren mucha menos energía que luchar con ellos. Todos podemos usar un poco de creatividad para manejar los momentos difíciles con nuestros hijos y cosechar los beneficios de una conexión más profunda y alegre en el hogar.

Muchas gracias a Miriam Adahan y su libro, "Criar hijos".