Este rabino es un sastre entrenado en Savile Row

El rabino Yosel Tiefenbrun siempre ha amado la ropa. Él recuerda que a los nueve años comenzó a preocuparse por lo que vestía y cómo lucía.

"Tenía un sentido de respeto por mi ropa", dijo. "Disfrutaba vestirme y encontrar piezas interesantes y combinarlas. Sentía una pasión por ello".

Creciendo en un hogar religioso afiliado a Jabad, a Tiefenbrun se le animó a convertirse en rabino y en emisario para ayudar a acercar a los judíos alejados. Aunque le gustaba mucho este camino, también quería convertirse en sastre profesional.

Entonces, ideó un plan para convertirse en rabino y también ser como Alexander McQueen, cuyos diseños de moda él admiraba. McQueen había sido aprendiz en Savile Row, una calle en el centro de Londres que ofrece la sastrería tradicional a medida de mayor calidad para hombres en el mundo entero. Tiefenbrun decidió que necesitaba ser un aprendiz allí.

"Estuve en una academia durante dos años bajo un sastre profesional en Savile Row", dijo. "Me enamoré de la sastrería masculina y me di cuenta de que era muy creativa. Crear algo desde cero es una sensación increíble".

Después de completar el curso de sastrería, Tiefenbrun se casó y se mudó con su esposa a Singapur para servir a la comunidad judía allí. Al mismo tiempo, trabajó en Kevin Seah Bespoke y tuvo a su primera hija.

Cuando tenía 28 años, él y su familia regresaron a Brooklyn, y abrió su propia casa de sastrería, TIEFENBRUN, en East Williamsburg. Rápidamente tuvo un gran éxito, sirviendo a clientes internacionales y siendo destacado en publicaciones como New York Times, Fortune Magazine, GQ, New York Post y Time Out London. También confeccionó trajes para el programa "Madam Secretary".

Tiefenbrun es popular en las redes sociales y tiene más de 100.000 seguidores en Instagram. En sus páginas, publica fotos de sí mismo confeccionando ropa, pasando tiempo con su esposa e hijos y mostrando sus diseños para sus clientes. Él es apasionado por lo que hace porque cree que la ropa puede transformar a una persona.

"Cuando hago una prenda para alguien, los ayudo a sentirse empoderados y seguros", dijo Tiefenbrun. "Puede ser que incluso lleguen a hacer actos de bondad extra. Sentirse mejor acerca de uno mismo resulta en ser mejor para las personas que te rodean".

TIEFENBRUN está ubicado en un vecindario moderno de Brooklyn, y Yosel atiende a un grupo diverso de clientes, desde jóvenes que viven cerca hasta personas que lo vuelan a Dubai u otros lugares del mundo para hacer ropa a medida. Aunque no revelará la lista de sus clientes por respeto a ellos, dijo que ha trabajado con músicos y actores famosos.

"Estas son personas de todos los ámbitos de la vida", dijo. "Judíos, no judíos, religiosos, no religiosos. Estoy rodeado de personas increíbles".

Como judío ortodoxo, Tiefenbrun tiene una larga barba y cubre su cabello con una kipá y un sombrero. Pero también se viste de manera diferente a otros hombres judíos religiosos, que típicamente optan por camisas blancas y sacos negros. En cambio, él viste ropa colorida con patrones interesantes y a veces completa su look con el par perfecto de tirantes.

"Las personas ven a alguien religioso haciendo algo completamente diferente", dijo. "Es realmente especial".

A veces, sus clientes le preguntan sobre judaísmo y él con gusto habla con ellos al respecto.

"Desarrollo relaciones con las personas", dijo. "Discutimos sobre judaísmo. Soy visiblemente religioso, pero también somos como cualquier otra persona. Apreciamos cosas similares sin importar de dónde somos. Somos seres humanos y tenemos los mismos pasatiempos e intereses, y nos conectamos a través de ellos".

El trabajo de Tiefenbrun está directamente relacionado con sus valores judíos. Hay muchas enseñanzas sobre la ropa, incluyendo el hecho de que nunca debes tener una mancha en tu ropa o desecharla de forma irreverente.

"La Torá nos enseña a no desperdiciar", dijo. "Debemos apreciar nuestra ropa y asegurarnos de que dure".

Para cumplir con esta mitzvá, Tiefenbrun insta a las personas a optar por ropa de alta calidad, en lugar de la "moda rápida", ropa de mala calidad que se desgasta fácilmente.

"La forma en que se fabrica de manera barata no respeta la tela", dijo. "No dura mucho y se desecha rápidamente. Cuando respetas la ropa, la tomas más en serio. Te ocupas más de ella. No necesariamente tienes que gastar una fortuna, pero sí debes ser más reflexivo a la hora de comprar".

En resumen, Tiefenbrun dice que es mejor tener unas pocas prendas hermosas y apreciadas en las que se gaste un poco más de dinero en lugar de tener muchas prendas baratas por las que realmente no te preocupas.

"Si está bien confeccionada, durará mucho tiempo", dijo. "Serás más agradecido y la apreciarás más".

En cuanto a Tiefenbrun, él está agradecido por trabajar en una carrera que disfruta y ayudar a las personas a sentirse más seguras de sí mismas.

"Estoy siguiendo mis sueños", dijo. "Soy apasionado, y creo que eso se nota en mi trabajo".