Receta clásica de hígado picado judío

El hígado picado es un plato complicado de preparar en casa porque a diferencia de otros cortes de carne kósher que se venden listos para cocinar después de haber sido remojados y salados para quitarles el exceso de sangre, el hígado no puede kasherizarse de esa forma. Cuando compras hígado crudo en la carnicería kósher, necesitas kasherizarlo y quitarle el exceso de sangre asándolo directo sobre el fuego. Si puedes comprarlo ya asado, eso te ahorrará tiempo y dificultad.

En nuestra familia, el truco para lograr un delicioso hígado picado es agregarle muchas cebollas caramelizadas que se cocinan a fuego bajo y lentamente durante mucho tiempo, lo que agrega un sabor dulce que equilibra el sabor del hígado. Muchos afirman que el secreto es el schmaltz, la 'grasa de pollo', pero dado que eso es más difícil de conseguir y muy complicado de preparar, nosotros nos conformamos y usamos aceite. Aprende aquí más sobre los orígenes del hígado picado.

Receta de hígado picado

Rinde 8 porciones

Tiempo de preparación: 30 minutos

Ingredientes:

• ¼ taza de grasa de pollo o aceite vegetal
• 1-2 cebollas medianas, picadas
• Sal y pimienta a gusto
• 500 gramos de hígado de pollo asado
• 3 huevos duros

Instrucciones:

1. En una sartén grande, calentar a fuego medio la grasa de pollo o el aceite. Agregar la cebolla, una pizca de sal y pimienta y bajar el fuego. Cocinar durante 30 minutos, revolviendo regularmente.
2. Transferir los hígados de pollo y las cebollas a un procesador de alimentos. Agregar los huevos duros y procesar hasta que la mezcla esté suave y tenga la consistencia deseada, o poner los hígados sobre una tabla y picarlos finamente con un cuchillo grande y ponerlos en un bol. Rallar arriba los huevos duros, agregar las cebollas y el aceite que haya quedado en la sartén. Mezclar bien.
3. Sazonar el hígado picado con sal y pimienta a gusto.
4. Servir el hígado picado solo o con galletas o pan. Se puede también usar para rellenar sándwiches o comerlo con matzá. ¡Disfrútalo!
5. El hígado picado se puede guardar tapado en el refrigerador durante 5 días.